EscucharJohnny Araya (PLN), Otto Guevara (Movimiento Libertario) y José María Villalta (Frente Amplio) se repartieron los más duros ataques en el debate de candidatos transmitido anoche por canal 7.
El liberacionista recibió los primeros dardos cuando Guevara y Luis Guillermo Solís, del PAC, criticaron el programa de asistencia social, Costa Rica Solidaria, que Araya anunció el viernes para dar un bono mensual de ¢20.000 a las personas en extrema pobreza.
El libertario calificó el programa de indignante, al tiempo que el aspirante de Acción Ciudadana (PAC) dijo que el Estado no disponía de esos recursos y que el plan terminaría en más clientelismo.
El candidato de Liberación Nacional (PLN) respondió que sí existen recursos y, para acceder a ellos, lo que hay que hacer es ordenar las instituciones de ayuda social.
Solís y Villalta cuestionaron a Guevara por su ofrecimiento de generar 500.000 empleos. El primero dijo que hasta Thelmo Vargas, candidato a vicepresidente del Libertario, comparó esa meta con que Costa Rica ganara el campeonato mundial de fútbol de Brasil.
El libertario se defendió con el argumento de que es posible crear los 500.000 puestos si la economía crece a un ritmo del 7% anual, evitando medidas que suban los costos de las empresas o que ahuyenten a los inversionistas.
En un momento, Araya pidió a Villalta decir cuáles son los monocultivos cuya expansión planea detener. El frenteamplista mencionó la piña al alegar que contamina las fuentes de agua y agota el suelo.
El aspirante de Liberación Nacional (PLN), entonces, le dijo que, por ese tipo de posiciones, había sectores empresariales preocupados y que el cultivo de piña genera 35.000 empleos directos.
Ideologías. Según Guevara, en la lectura del plan de gobierno del Frente Amplio, él encuentra similitudes con el “comunismo” de Venezuela, donde se expropian empresas, se controlan precios y los productores abandonan sus actividades, lo cual da a pie a la escasez de alimentos y enseres.
Villalta insistió en que no es cierto lo que el libertario deduce y le achacó tildar de comunismo la participación de las comunidades en la toma de decisiones y la regulación de los mercados para frenar prácticas monopólicas.
El frenteamplista alegó que sus rivales asustan con esa etiqueta. Rodolfo Piza, de la Unidad Social Cristiana (PUSC), le reprochó el haber iniciado con las etiquetas, acusando a todos de corruptos y de neoliberales. “No es suficiente inventarse un discurso callejero difamando a los demás”, le dijo.
Solís también preguntó a Araya por qué, como alcalde de San José, ganó más que sus pares en París y Madrid. Además, afirmó tener datos de que el liberacionista tuvo un supuesto sobresueldo.
Araya respondió que no existió tal excedente salarial y mostró una nota del jefe de Recursos Humanos de la Municipalidad de San José. Añadió que nunca influyó en la definición del sueldo, sino que este se rige según el Código Municipal.
El liberacionista, por su parte, pidió a Guevara aclarar el origen de los $500.000 que el libertario obtuvo, en la campaña pasada, gracias a un préstamo con una comerciante.
Otto Guevara sostuvo que un informe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), del 15 de noviembre, afirmó que no hubo ninguna actividad ilícita de las personas que le prestaron el dinero.
Araya le dijo que el informe también mencionaba que los movimientos financieros, que precedieron a ese crédito, respondían a una “estructura consensuada para dificultar el rastreo de los recursos”.
Villalta también cuestionó a Guevara por las supuestas capacitaciones falsas que el Libertario cobró al TSE, tema por el cual el Ministerio Público presentó una acusación. Guevara hizo ver que él no era parte de los acusados.
