Una mezcla de simpatías y antipatías políticas alimenta los caudales electorales que en este momento tienen José María Villalta y Otto Guevara, candidatos presidenciales del Frente Amplio y del Movimiento Libertario.
El liberacionista Johnny Araya Araya, en cambio, se alimenta principalmente del voto duro de los simpatizantes del Partido de Liberación Nacional (PLN), con el inconveniente de que este grupo se redujo entre setiembre y noviembre.
Según la encuesta de Unimer, además de los seguidores de sus respectivos partidos, tanto Villalta como Guevara muerden apoyo entre la gente que no se declara afín a grupo político alguno.
El caudal de ambos políticos se nutre en un 40% de los “sin partido”. En el caso de Araya, ese grupo representa menos de un 20%.
Antes, con otros. Unimer también exploró la composición de los apoyos según la forma en que los electores votaron en el 2010.
Como en el caso anterior, Villalta y Guevara permean en grupos más variados que Araya.
Villalta recibe principalmente caudal que antes era del PAC. El 31% de los que apoyan al frenteamplista votaron hace cuatro años por Ottón Solís, excandidato de Acción Ciudadana (PAC). Además, un 18% votó por Laura Chinchilla y un 13% por Guevara.
En el caso del libertario, este conserva una base de personas que votaron por él en el 2010. Ellos representan el 40% de su caudal, pero además recibe apoyos de quienes se inclinaron por Chinchilla (16%) y Ottón Solís (9%).
Para Johnny Araya, la mayoría de su apoyo actual (55%) votó por Chinchilla.
Por edad, zonas y condición. Villalta recauda su mayor apoyo entre menores de 30 años, habitantes de la gran área metropolitana, graduados universitarios y personas de nivel socioeconómico alto.
Araya recauda un mayor de apoyo en las zonas rurales que en las urbanas. Tiene más apoyo entre los mayores de 30 años y entre los que solo estudiaron secundaria. Por nivel económico, su apoyo es parecido en todos los estratos.
Guevara recibe más respaldo entre los menores de 30 y personas de nivel económico bajo.
Por ideología. En un país donde una tercera parte (un 35%) no se identifica con ideologías políticas, las posiciones de izquierda, centro y derecha también se mezclan en los apoyos electorales.
Villalta se nutre principalmente de ciudadanos que se declaran de centro (51%) y seguidos por los que dicen ser de derecha (17%), una ideología opuesta a la de este candidato.
Un 9% de quienes apoyan al frenteamplista dicen ser izquierdistas, mientras que un 23% no declara ideología alguna.
El libertario Otto Guevara se nutre principalmente de gente que no habla de ideologías (37%) y de personas de centro (36%), mientras que de los de derecha, la tendencia de este candidato, recibe un porcentaje menor (23%).
Johnny Araya percibe un 41% de apoyo de gente de centro y un 28% de gente de derecha.
En el país, según la encuesta, solo un 5% se declara de izquierda. Un 40% dice ser de centro y un 20%, de derecha.
Esta campaña, además, despierta el interés de quienes no votaron en el 2010 y quienes han sido abstencionistas.