El presidente Luis Guillermo Solís salió al paso ante el temor de los ciudadanos de que la euforia mundialista sirva para distraer a la población mientras le aumentan el precio de servicios básicos.
Todo lo contrario: Solís anunció que pedirá a la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) una explicación detallada sobre la solicitud de aumento en el costo final de los combustibles. También dijo que someterá a discusión la propuesta de la Superintendencia de Telecomunicaciones de cobrar el Internet celular según la cantidad de datos descargados, método que incrementaría el costo.
Así lo afirmó el presidente en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la cual también aseguró que ya es la hora de hablar sobre el mecanismo para rebajar el costo de la luz, entre otros temas.
"No se debe aprovechar el Mundial. La gente de este país no es estúpida", respondió el mandatario a la prensa.
Agregó que además es posible una derrota de la Selección de fútbol, lo cual cambiaría el escenario. Sin embargo, su pronóstico para el juego del viernes es de 1 a 0 a favor de los ticos.
Sobre la solicitud a la Aresep dijo: "quiero ver si se puede revisar el modelo tarifario, convendría que nos digan por qué estámos pagando tanto" y señaló que esto ocurre mientras en esa institución se están aplicando aumentos de salario.
En cuanto al cambio de modalidad de pago del Internet, el mandatario dijo que se debe mantener el interés superior por encima de los intereses particulares, en beneficio de la ciudadanía.
"Queremos tener información clara para tener un debate de claridad, ojalá con muñequitos para que todos entendamos", afirmó.
Estos fueron algunos puntos abordados por Solís, además de nombramientos que tenía pendientes en juntas directivas, el viceministerio de Ciencia y Tecnología (Carolina Vásquez) y el de la Presidencia (Daniel Soley).
En referencia a los puestos diplomáticos se confirmó el cese de embajadores nombrados por criterio político en el Gobierno anterior, incluido el de Fernando Sánchez en el Vaticano.
"Nadie es indispensable", dijo el presidente.
Solís también hizo un recuento sobre su viaje a Estados Unidos la semana pasada en el cual tocó con el Banco Mundial la posibilidad de una prórroga para el proyecto Limón Ciudad Puerto, la cual no ha sido aprobada.
"El Banco Mundial considera este proyecto como uno de los peores que tiene, yo diría que hay que cambiarle hasta el nombre (...) la gestión en seis años de parte de Costa Rica es deplorable", pronunció como crítica directa al gobierno de Laura Chinchilla y de Óscar Arias.
Solís advirtió que el Banco Mundial está dispuesto a seguir ayudando a Costa Rica a mejorar la ciudad de Limón, aun que se desconoce si será mediante este proyecto.