Siete de las nueve alcantarillas que incluyó el nuevo gobierno en su primer decreto –el 8 de mayo– para que fueran intervenidas con urgencia las había reparado desde principios de año el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi).
Las estructuras, que en su mayoría están en la carretera de Circunvalación y en la ruta 32 (San José–Limón), fueron intervenidas entre enero y abril. Las dos pendientes de arreglo están en la autopista Florencio del Castillo.
La declaratoria para la intervención de estas estructuras incluye la reparación de 12 puentes y constituyó la primera directriz de Luis Guillermo Solís como presidente de la República . De los puentes, ninguno ha sido intervenido.
El Gobierno entrante se basó en dos informes del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) –elaborados en diciembre anterior – para definir la prioridad de intervención de esos pasos de agua.
El MOPT realizó una conferencia de prensa, el pasado lunes (cuatro días después de emitido el decreto), para detallar cómo intervendrían estas estructuras. Sin embargo, nunca indicó que de las nueve alcantarillas, siete ya estaban reparadas.
No lo informó pese a que allí estaba Cristian Vargas, jerarca del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y quien ocupa ese cargo desde la administración anterior.
En esa conferencia anunciaron que una comisión integrada por el Conavi, MOPT, Lanamme y la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) vería el tema para definir el orden de prioridades a fin de hacer las reparaciones en cada uno de los puntos señalados.
Entre tanto, La Nación consultó ayer a Mauricio Sojo, ingeniero del Conavi encargado de las obras, y confirmó los trabajos en las siete alcantarillas. Según detalló, las obras concluyeron en abril y costaron ¢250 millones.
Ese mes, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), emitió un comunicado de prensa en el que dio a conocer los arreglos de las alcantarillas.
Sojo sostuvo que en cada uno de los pasos se realizó limpieza. Además se construyeron obras de protección recomendadas, justamente, en el informe del Lanamme.
“Básicamente lo que se mejoró fueron taludes, cabezales y alerones; se revirtieron los pisos de las alcantarillas corrugadas. Todo esto se hizo acatando las recomendaciones que hizo el Lanamme en el informe”, sostuvo Sojo.
Las alcantarillas intervenidas fueron las de quebrada Los Negritos, río Ocloro, río María Aguilar, río Torres, entre Pavas y La Uruca, río Torres, en Guadalupe (todas sobre ruta 39), mientras que en la ruta 32 se trabajó en quebrada Cangrejos y quebrada Sin Nombre.
Confusión. Se consultó a Carlos Segnini, ministro de Transportes, sobre esta situación, pero el jerarca, por medio del Departamento de Prensa, dijo haber solicitado un informe con detalles de la situación del proyecto. Adelantó que se referirá al tema una vez que cuente con los informes respectivos.
Asimismo, se preguntó a Cristian Vargas, director del Conavi, pero manifestó, por medio de su Oficina de Prensa, que el designado para dar declaraciones sobre ese tema es el ministro.
Luis Guillermo Loría, coordinador del Programa de Infraestructura en Transportes (Pitra) del Lanamme y parte de la comisión que designó Segnini para que analizara la ejecución del decreto, dijo que en el Laboratorio conocía de las obras hechas por Conavi.
“Nosotros sí sabíamos de los trabajos, pero debemos ir a verificar si fueron los correctos. En la primera reunión con el Conavi y la CNE se habló, pero no sabemos si el ministro ya conocía ese detalle”, expresó el representante del Lanamme.