Un grupo de sindicatos –que dicen congregar a unos 50.000 afiliados– anunció la mañana de este miércoles el fin de la relación cordial que han mantenido con el gobierno de Luis Guillermo Solís, por su manera de atender la huelga en los muelles de Limón.
El grupo autodenominado "Patria justa", con los voceros Albino Vargas y Fabio Chaves, consideraron que Solís los engañó con la promesa de campaña de renegociar el contrato de concesión muellera con APM Terminals.
Por eso anunciaron "acciones más fuertes" en los próximos días, como apoyo al sindicato de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva), que llega hoy miércoles a su noveno día de huelga, mientras los muelles siguen operados por personal contratado para la ocasión.
El grupo "Patria justa" los forman la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP), el Frente Interno de Trabajadores (FIT) del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), llama llamado Asdeice, el del Instituto Nacional de Seguros, llamado Upins, y el de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), además de la agrupación nacional de enfermeros.
Albino Vargas dijo que esta coalición sindical decisión retirarse de las mesas de diálogo convocadas por el Gobierno en materia social y energética, pues creen que la postura del Gobierno sobre la huelga en Japdeva ha sido un "indicador" negativo.
Fabio Chaves, sindicalista del ICE, dijo que esta huelga marca el camino que seguirá la relación entre Gobierno y sindicatos, a pesar de la cordialidad relativa que han mantenido en estos seis meses de gestión de Solís, a quien los dirigentes dicen haber ayudado a lograr los 1,3 millones de votos el 6 de abril.
Pese a esta postura de los sindicatos en San José, el Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap) sí continúa en diálogo con el Gobierno, después de que su secretario general, Ronaldo Blear, ofreció disculpas por participar en la quema de un retrato del presidente de la República y tres ministros.