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Este lunes por la tarde, a las 4:35 p. m., los diputados aprobaron en segundo debate el proyecto de Ley de Reforma Procesal Laboral, el cual agiliza los juicios en esa materia.
A favor de la iniciativa estuvieron 41 legisladores, mientras que Ligia Fallas y Carlos Hernández, del Frente Amplio, votaron en contra.
Para Fallas, la reforma solo entorpece el proceso de realización de las huelgas y será negativo para el movimiento sindical.
Afuera del salón plenario, mientras ella lanzaba ataques contra los parlamentarios que aprobaron la iniciativa, varios miembros de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) esperaban con ansia la aprobación del plan.
El texto revive la ley vetada en octubre del 2012 por la entonces presidenta Laura Chinchilla, pero sin los artículos que ese Gobierno consideró inconstitucionales.
Se trata de las normas que permitían la realización de las huelgas en servicios básicos esenciales, como los prestados por hospitales y por la Policía.
Los diputados rescataron el plan porque introducirá la oralidad en los juicios laborales, con lo que se estima que su duración disminuirá de los actuales cinco o 10 años de duración, a un promedio de un año y medio o dos.
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De esta forma, la evaluación de la prueba, las audiencias de las partes y la resolución de los jueces podrán ser inmediatos.
Además, el nuevo texto establece que, cuando un grupo decida irse a huelga, el 35% de los empleados de una empresa debe votar y, para legalizar el movimiento, tiene que aprobarlo la mitad más uno.
Por otra parte, se establece la posibilidad de acceso a defensa pública para los trabajadores que no pueden pagar abogados.
La reforma regresó al Congreso cuando la Sala Constitucional resolvió una acción en contra del decreto de Luis Guillermo Solís, de diciembre del 2014, quien levantó el veto de Chinchilla.
En su decisión, los magistrados explicaron que, en mayo del 2013, Chinchilla cometió un error al retirar parte del veto que ella misma impuso, pues antes no se había tramitado de manera correcta en el Congreso.
