El director de Transporte Eléctrico de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL), Allan Blanco, les prometió a los diputados que Costa Rica tendrá la infraestructura adecuada para el uso de vehículos eléctricos.
Blanco se presentó ante la Comisión Permanente de Asuntos de Gobierno de la Asamblea Legislativa para anunciar que ya está en marcha el plan de infraestructura, con el fin de echar a andar ese tipo de automotores por Costa Rica.
La discusión se dio en el marco del trámite del Proyecto de Ley de incentivo y promoción para el transporte eléctrico, que se analiza en el foro parlamentario.
En el plan de infraestructura trabajan, según les contó Blanco a los legisladores, las empresas distribuidoras de electricidad, instituciones de gobierno como el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), la propia CNFL, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y empresas privadas que se encargarían de colocar centros de carga de automóviles que funcionan con energía eléctrica.
“Para agosto de este año ya se podrían instalar empresas distribuidoras de este tipo de carros en suelo nacional”, aseguró Blanco.
Según la iniciativa, durante cinco años, el Gobierno se compromete a dar incentivos y cumplir con sus obligaciones para desarrollar esta industria automotriz, que pueda sustituir la flotilla vehicular de combustibles no renovables por la de electricidad.
Los autos eléctricos son más caros que los comunes, por lo que se plantea la opción de quitarles los impuestos selectivo de consumo, de ventas, el aduanero y parte del derecho de circulación, para abaratar su costo.
La iniciativa de ley fue presentada por los diputados del Partido Acción Ciudadana (PAC) Marcela Guerrero y Franklin Corella, quienes aspiran a que el proyecto sea dictaminado antes de que terminen las sesiones extraordinarias, el 30 de abril.