El canciller Manuel González expuso ayer a su par estadounidense, John Kerry, la preocupación de Costa Rica por la carrera armamentista que desarrolla Nicaragua.
González le expresó el temor de que con la excusa de atacar al narcotráfico, el gobierno de Daniel Ortega incremente sus compras de armas y rompa el equilibrio de la paz en Centroamérica.
Así lo declaró el vicecanciller Alejandro Solano, luego de que el ministro de Relaciones Exteriores se reuniera con el secretario de Estado en Washington, Estados Unidos.
Solano dijo, por ejemplo, que los aviones MiG-29 que Managua planea comprar no sirven para combatir el narcotráfico, pese a que el Ejército de Nicaragua informó de que los usaría para ese fin.
Los cazas MiG-29 son el caballo de batalla de la Fuerza Aérea rusa, desde mediados de los ochenta.
Según Solano, Estados Unidos compartió la preocupación de Costa Rica.
El canciller González aprovecha cada reunión internacional para expresar la preocupación de Costa Rica por el interés de Nicaragua en renovar y aumentar su armamento.
El año pasado, por ejemplo, trascendió que el Ejército nicaragüense estaba en negociaciones con Moscú para adquirir barcos artillados.
González y Kerry también conversaron sobre la reciente cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), celebrada en Costa Rica, a finales de enero. Estados Unidos monitoreó la cita y ve con cautela el desarrollo de la organización, dijo Solano.
Además, hablaron sobre la Cumbre de las Américas, que se celebrará en abril, en Panamá, donde el mandatario norteamericano, Barack Obama, podría encontrarse con su homólogo cubano, Raúl Castro, tras el descongelamiento de las relaciones entre sus gobiernos.