Los temores del ministro de Hacienda, Guillermo Zúñiga, quedaron en eso, en temores.
El Gobierno de China completó ya los $300 millones que se había comprometido a prestar cuando firmó el establecimiento de relaciones diplomáticas con Costa Rica, en junio del 2007.
La publicación de los detalles del crédito, cubiertos por una confidencialidad que después rompió la Sala Constitucional, resultó ser inofensiva para que China depositara la segunda mitad, $150 millones, a principios de este año, tal como estaba programado.
La noticia la difundió ayer el Ministerio de Hacienda, que confirmó el mantenimiento de las condiciones favorables del crédito.
Los $300 millones fueron prestado con una tasa de interés del 2%, con cuotas semestrales y a un plazo de 12 años.
El prestamista es la Agencia Estatal de Reservas en el Extranjero (SAFE, por sus siglas en inglés), tal como lo reveló Zúñiga después de que la Sala Constitucional acogió un recurso de amparo de este diario para conocer aspectos del crédito.
“Nos complace mucho haber concretado esta segunda transacción bajo las mismas condiciones y bajo los mismos procedimientos que fueron oportunamente analizados y avalados por la Contraloría General de la República”, manifestó el Ministro mediante el comunicado de prensa.
Después del secreto. Los primeros $150 millones entraron a Hacienda en enero del 2008, cuando las autoridades insistían en la vigencia de un “secreto bursátil” que pretendía complacer el deseo de confidencialidad pedido por el régimen de Hu Jintao.
Tras el levantamiento del secreto se comprobó que el crédito fue parte integral del establecimiento de las relaciones con China y el consecuente rompimiento diplomático con Taiwán, a pesar de que Zúñiga y el propio presidente, Óscar Arias, negaron la existencia de los acuerdos ya firmados.
Este fue uno de los elementos del paquete de ayuda económica que los espías taiwaneses conocieron solo horas después de la visita del canciller Bruno Stagno a Pekín, el 1° de junio del 2007.
“La inteligencia de Taipéi nos pilló en la mentira”, dijo Arias el 12 de setiembre, poco después de que los principales medios especializados en economía había difundido el caso de Costa Rica como un ejemplo de la forma de China de llevar su diplomacia.
Ese secreto intentaba cubrir los detalles que resultaron favorables para que el Gobierno pudiera pagar otras deudas que tenían una tasa de interés mayor.
La relación entre Costa Rica y China abarca también donaciones para atender desastres naturales y el nuevo estadio nacional, además de ayudas como las 200 patrullas recién llegadas a suelo tico.