Los diputados corren, a dos días de salir a vacaciones, para aprobar un proyecto de ley que permita revivir la fertilización in vitro (FIV) en Costa Rica.
La alerta se enciende de nuevo en la Asamblea Legislativa, ante el inminente vencimiento del plazo dado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos para que el Estado informe sobre el cumplimiento de la sentencia, la cual obliga al Gobierno a reactivar la técnica de fecundación.
Ese plazo para informar de los avances se cumple este viernes 20 de diciembre, a un año de la notificación de la sentencia, pero los diputados aún no han aprobado el proyecto de ley.
Ayer, tras una reunión entre jefes de fracción y legisladores de la Comisión de Asuntos Sociales, el presidente de la Asamblea Legislativa, Luis Fernando Mendoza, presentó una resolución para agilizar el trámite del proyecto.
Mendoza ordenó colocar en el primer lugar de la agenda del plenario la iniciativa y desechar todas las mociones que busquen modificar el proyecto, si la intención es cambiar el texto original.
De hecho, la primera moción planteada busca cambiar el texto base que llegó al plenario en setiembre pasado, presentado por el independiente Luis Fishman.
En la cita, ayer, jefes de fracción y congresistas se comprometieron a discutir cambios para depurar una iniciativa de consenso entre las fracciones políticas.
La FIV está prohibida en Costa Rica por una resolución de la Sala Constitucional, de marzo del 2000, y la Corte Interamericana condenó por ello al país hace un año al considerar que se violó un derecho humano.
El proyecto de Fishman consta solo de cuatro artículos. En ellos, se nombra al Ministerio de Salud como regulador del procedimiento, se prohíbe la implantación de más de tres embriones en el útero y, los que no se usen, se podrán congelar y ser implantados luego en la misma mujer. Queda prohibida la donación o comercialización y se castiga con prisión de dos a seis años al que done, negocie, venda o compre embriones humanos.
Bloqueo. Carlos Avendaño, legislador de Restauración Nacional, ha presentado 839 mociones para bloquear la discusión de este plan.
Él alega que Mendoza no le puede desechar sus mociones, pues, con ello, dice, se le viola su derecho de enmienda a un proyecto.
Manrique Oviedo, del Partido Acción Ciudadana, apoya el reclamo de Avendaño, pese a que la mayoría de sus compañeros de bancada está a favor de reactivar la FIV.
“El presidente, por temores infundados y sin sustento actúa de forma indebida y abre la puerta a cualquier arbitrariedad”, dijo.
María Eugenia Venegas, del PAC; Gloria Bejarano, del PUSC, y Rita Chaves, del PASE, se mostraron satisfechas del intento de avance que se dio ayer mismo.
“Hasta la fecha ha habido cerca de cinco visiones diferentes, pero ya se empezó a ceder”, dijo Chaves. Ella no tiene una posición favorable al proyecto, pero está de acuerdo en que hay que cumplir la orden de la Corte. Bejarano explicó que intentan fijar un texto que cumpla con los requisitos mínimos ordenados por la sentencia.