El Frente Amplio (FA) ocultó las verdaderas razones por las cuales renunció ayer su diputado Ronal Vargas (Guanacaste).
En una primera versión, Vargas dijo que dejaba el cargo por problemas de salud, aunque, en realidad, su salida se debió a una queja por acoso sexual.
En una entrevista con La Nación poco antes de las 6 p. m. el jefe de fracción del FA, Gerardo Vargas, aceptó que la verdadera razón fue una denuncia por acoso sexual.
El congresista explicó que la semana anterior una asesora de Vargas se le acercó para quejarse de una “situación” referente a la conducta del legislador.
Este medio le preguntó a Vargas si esa situación se refería a un supuesto caso de acoso sexual.
“Se refiere a una situación que habló conmigo una muchacha que trabaja de asesora en la Asamblea Legislativa, y a raíz de eso fue que le solicitamos a Ronal su renuncia”, contestó Vargas.
Previamente, en un emotivo discurso de despedida, el legislador, un exsacerdote, teólogo y activista de izquierda de 48 años, dijo haber recibido un diagnóstico médico sobre una grave enfermedad que nunca identificó.
“Ha sido peor de lo que esperaba. Me tendré que someter de inmediato a un proceso muy largo de tratamiento, por lo que tendré que ausentarme definitivamente de mi trabajo”, argumentó frente al plenario y con la atención de todos los medios de prensa.
El congresista fue aplaudido por sus compañeros y, uno a uno, desfilaron para abrazarlo.
Varios legisladores se observaban llorosos. Incluso el presidente de la República, Luis Guillermo Solís, emitió mensajes de solidaridad para con el congresista.
¿Por qué callar? La petición de renuncia, relató Gerardo Vargas, la hizo la mañana de ayer, en una reunión con el diputado en la que participaron el excandidato José María Villalta y al secretario general del Partido, Rodolfo Ulloa.
Hasta ese momento, la versión oficial del Partido hacía referencia, exclusivamente, a “motivos personales”. Así lo había señalado un comunicado de la agrupación a las 3:16 p. m.
“Respetamos la decisión del diputado Ronal Vargas y confiamos en la capacidad de la compañera Suray Carrillo para dar continuidad al trabajo en pro de la provincia de Guanacaste y del país”, señaló el boletín.
Sin embargo, luego de la entrevista con este diario, el subjefe de fracción, Edgardo Araya, convocó a una conferencia de prensa a las 9 p. m. en la que ratificó la versión de la queja por acoso sexual.
El legislador rechazó haber engañado a los diputados con el tema de la enfermedad, pues no les consta.
Recalcó que hay una queja, no una denuncia formal, aunque de seguido expresó que las pruebas que tienen son suficiente motivo para que se sancionara a Vargas.
Araya recalcó que no querían decir que era por un tema de acoso por un asunto de consideración para con la víctima, sus parientes y la familia del diputado.
Tres horas después de que el jefe de bancada había hablado con este diario, Araya salió a conferencia de prensa “ante las especulaciones” que habían surgido.
¿Qué cambió las cosas? ¿Qué pasó ayer en el plenario? Los diputados del Frente Amplio esperaban que Vargas se despidiera de sus compañeros sin mayor sobresalto, aduciendo, como habían acordado, razones personales.
El jefe de bancada explicó que en ningún momento habían acordado hablar de una enfermedad, sino de asuntos personales. Las lágrimas de Vargas no estaban presupuestadas.
Gerardo Vargas recordó que en ese momento se dirigió a los jefes de fracción para aclararles que los diputados del Frente Amplio tampoco sabían de la versión de los supuestos problemas de salud de Vargas.
No obstante, al saber que este medio conocía la verdadera razón, Vargas detalló a las 6 p. m. lo que había sucedido con el legislador y su asesora de despacho.
“Yo lo busqué a él y le dije que tenía que hablar con él sobre una situación que yo conocía y, entonces, a raíz de esa información que yo conocía, hablamos y hoy en la mañana (ayer) conversamos Ronal, Rodolfo Ulloa (secretario general del Frente Amplio), José María Villalta y yo.
”Le dijimos a Ronal que conocíamos la situación y que, por lo tanto, nosotros, como autoridades del Partido Frente Amplio, solicitábamos su renuncia”, detalló Vargas. Colaboraron los periodistas Álvaro Murillo y Natasha Cambronero.