El ministro de Seguridad de Costa Rica, Gustavo Mata, y el viceministro de Seguridad de Panamá, Rogelio Donadío, se reunieron este martes, a las 11 a. m., en la delegación policial de Paso Canoas, para tratar de encontrar una solución conjunta a la crisis migratoria que ha dejado varado a un grupo de unas 600 personas en la frontera entre ambos países.
Mata sostuvo la posición del Gobierno de Costa Rica de determinar el estatus legal de los migrantes y que, de encontrarse de forma ilegal en nuestro país, deportarlos a sus lugares de origen.
Explicó que el plan gubernamental es trasladar a los migrantes -la mayoría de ellos, provenientes de distintos países de África- a un centro de detención donde, con la cooperación de la Interpol, se les identificará, dado que la mayoría de ellos no cuenta con documentación legal.
Una vez determinada la identidad de estas personas, se procederá a expulsarlas del país.
Apenas unas horas antes, un grupo de migrantes se manifestó, de forma pacífica, en contra de la deportación; aseguraron que su única intención es seguir su camino hacia Estados Unidos. También aseguraron que no piensan abordar ningún bus ni movilizarse a ningún centro de detención.
Consultado sobre estas declaraciones y sobre la posibilidad de que los migrantes se nieguen a cooperar, Mata aseguró que "la idea es hablar y que ellos estén de acuerdo, partiendo de un punto de vista humanitario". Explicó que en el centro de detención se les prestarán facilidades de refugio, comida y salud.
"También queremos liberar esta zona", agregó, refiriéndose a la contrarraya fronteriza donde los migrantes han hecho campamento, "por razones de seguridad y salubridad pública", dijo el ministro costarricense.
Por su parte, Donadío enfatizó en que las buenas relaciones entre Panamá y Costa Rica serán esenciales para encontrar una solución conjunta a una problemática que afecta a ambas naciones.
"Vamos a encontrar una solución dentro de lo que manda la ley de ambos países", comentó. Agregó que ordenó al cuerpo de policía panameño retirarse de la frontera, como una señal de buena fe.
Sobre el por qué los migrantes logran entrar a Panamá y es en Costa Rica donde encuentran un tapón, Donadío acusó la dificultad de vigilar la frontera canalera con Colombia, dominada casi toda por terreno selvático, que dificulta los controles de ingreso."Tenemos que encontrar respuestas en palabras sabias, como las del presidente Luis Guillermo Solís", manifestó Donadío, "somos países fortaleciendo la democracia".
A la reunión entre ambos funcionarios no fue convocado ningún representante del grupo de migrantes.