El presidente Luis Guillermo Solís confirmó esta mañana la renuncia del obispo luterano, Melvin Jiménez, al cargo de ministro de la Presidencia.
Lo anunció durante la inauguración del Colegio Técnico Profesional de San Isidro de Heredia, menos de 24 horas después de que el diputado del PAC, Víctor Hugo Morales Zapata, lo dijera en un programa radiofónico.
Solís afirmó que le pidió la salida a Jiménez y que esta se hizo efectiva desde hoy. "Su tiempo en el Gobierno terminó", declaró. "Tenía un enorme desgaste".
Vea una cronología de la gestión del ahora exministro en este enlace y el video de las declaraciones de Luis Guillermo Solís aquí.
Jiménez fue objeto de críticas en los últimos diez días, luego de conocerse que un asesor suyo colaboró en la "socialización" del proyecto de ley que permitiría al Gobierno hasta cerrar medios de comunicación por el contenido de sus mensajes. Es decir, en el planeamiento de la divulgación del plan.
La polémico se avivó cuando el exviceministro de Telecomunicaciones, Allan Ruiz, dijo que Jiménez le pidió la renuncia por el manejo político de ese proyecto y, acto seguido, le ofreció una embajada. Esta última aseveración se sumó al escándalo suscitado en enero, cuando la procuradora general, Ana Lorena Brenes, relató que el entonces viceministro de la Presidencia, Daniel Soley, le ofreció opciones de embajadas, lo que ella interpretó como una invitación a renunciar.
En cuanto a lo dicho por Morales Zapata, el presidente Solís dijo que él no autorizó el anuncio, al tiempo que el presidente del Congreso, Henry Mora, adujo que el diputado se tomó atribuciones que no le corresponden.
El mandatario añadió que el sustituto será anunciado mañana.