Como si fuera la visita no deseada de un familiar incómodo o del cobrador de una deuda, los diputados de oposición le anuncian al Gobierno la llegada al Congreso de la discusión sobre los salarios de los empleados públicos, tercera prioridad en agenda de la alianza opositora.
Aprobados los proyectos sobre recorte del gasto estatal en pensiones (salvo el referido a las jubilaciones del Poder Judicial) y superado el capítulo de los planes sobre fraude fiscal, financiamiento al terrorismo y soborno transnacional, le llegó la hora a la revisión de los pluses salariales del Estado.
Así opinaron el presidente legislativo, Antonio Álvarez Desanti, sus compañeras del Partido Liberación Nacional (PLN) Sandra Piszk y Maureen Clarke, y la presidenta de la Comisión de Hacendarios, la socialcristiana Rosibel Ramos.
Ese debate, con el que Legislativo y Ejecutivo sazonarán la temporada navideña, será anterior a cualquier revisión de los impuestos de ventas y renta que quiera la Presidencia de la República, enfatizó Ramos.
Por su parte, Álvarez añadió que aún está por definir con claridad, en el seno del bloque opositor, si los impuestos se discutirán hasta que el plan sobre empleo público esté aprobado con el primero de dos debates, o antes de llegar a ese punto definitivo.
Igualar pluses. En junio, cuando se definió el camino por seguir en los proyectos sobre pensiones y gasto público, los partidos de oposición acordaron sustituir el texto del proyecto de ley 19.923 (rechazado por los sindicatos), también relacionado con empleo público, por el plan 19.506, que Piszk ha venido trabajando con el Gobierno y con diputadas del Partido Acción Ciudadana (PAC) y del Frente Amplio, entre otros legisladores integrantes de la subcomisión de Sociales que revisa el tema.
“Hemos conversado con el viceministro de Presidencia (Luis Paulino Mora), les hemos mostrado los avances de la subcomisión, porque ha cambiado mucho desde su publicación en La Gaceta”, comentó Piszk.
Ella añadió que no es momento para impuestos, hasta que avance la homogenización de los pluses, pues eso es lo que pretende precisamente su iniciativa.
La idea de Piszk es generar un marco general para otorgar los pluses, con el fin de reducir la brecha entre lo que ganan funcionarios de unos sectores y de otros, en particular anualidades y dedicación exclusiva, por ejemplo.
Actualmente hay instituciones públicas que pagan a sus empleados hasta un 5,5% por concepto de años servidos, mientras que otros reciben un 2% por el mismo beneficio salarial.
“Están dadas las condiciones (para la discusión), pero vamos a ver si no le da canillera a ninguna fracción de la Alianza, si ninguna se apendeja, porque hay compromisos firmados por el presidente legislativo y la jefa de fracción del PLN”, dijo Ramos.
Se intentó conocer la posición del Gobierno, pero los jerarcas del PAC no respondieron y los del Ministerio de la Presidencia estaban en los actos de celebración de la independencia.