La Sala IV anuló ayer, por discriminatoria, la posibilidad de realizar en diciembre un referendo para que la ciudadanía apruebe o rechace las uniones civiles entre personas del mismo sexo.
Cinco de siete magistrados concluyeron que los derechos de una minoría no pueden ser sometidos a la decisión de la mayoría.
En un comunicado, la Sala Constitucional agregó que la consulta popular habría profundizado la discriminación en contra de los homosexuales.
“Las personas que tienen relaciones con una pareja del mismo sexo son un grupo en desventaja y objeto de discriminación que precisa del apoyo de los poderes públicos para el reconocimiento de sus derechos constitucionales”, destaca el documento.
Ante ello, los magistrados anularon la recolección de 150.000 firmas, autorizadas por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) para solicitar el referendo, y le ordenó a su presidente, Luis Antonio Sobrado, abstenerse de incurrir de nuevo “en tales conductas”.
Sobrado sostuvo ayer que su institución actuó apegada a la ley. “No habrá discusión sobre este tema en la ciudadanía”, lamentó. El Tribunal prevía hacer la consulta pública junto con las elecciones municipales el 5 de diciembre.
De acuerdo con la Sala IV, la figura del referendo no puede ser usada para decidir sobre derechos humanos garantizados en tratados internacionales, según lo establece el párrafo 1 del artículo 105 de la Constitución Política.
Además, indicaron los magistrados, el tema sobre las uniones civiles gais es resorte de los diputados y no del TSE.
Con estos argumentos, la Sala avaló un recurso de amparo interpuesto contra el Tribunal Supremo de Elecciones por el abogado Esteban Quirós, quien ayer celebró la ratificación de que las uniones gais son materia legislativa y de derechos humanos.
Dos magistrados declararon sin lugar el recurso de amparo: Gilbert Armijo y Fernando Castillo.
La recolección de firmas para el referendo fue promovida por los abogados Alexandra Loría Beeche, Jorge Fisher Aragón, Gustavo Edwards Valerín y Cleto Lacey Lacey.
Al conocer el fallo de la Sala IV, Edwards opinó ayer que “sería más injusto aceptar que el criterio de una minoría le sea impuesto al criterio de una mayoría”.
Las firmas recolectadas perseguían que el electorado aprobara o improbara el proyecto de ley de unión civil entre personas del mismo sexo, tramitado en el Congreso según el expediente 16.390.
Ese plan, además de autorizar las uniones gais ante los juzgados, regularía la separación de estas parejas e incluso la fijación de pensiones alimentarias.