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El presidente de la República, Luis Guillermo Solís, le devolvió las críticas a Daniel Ortega al decir que el discurso del nicaragüense "no es constructivo", en procura de un reingreso de Costa Rica al Sistema de Integración Centroamericana (SICA).
"Sobre las declaraciones del presidente Ortega, creo que no son constructivas, no reflejan el tono dialogante que utilicé ayer con el presidente Juan Orlando Hernández, de Honduras, para manifestar la voluntad del gobierno de Costa Rica para aproximarse a una declaración que fuera satisfactoria, no para Costa Rica, sino para Centroamérica en el esfuerzo que queremos realizar de fortalecimiento del Sistema", dijo Solís esta mañana en Casa Presidencial.
El mandatario costarricense respondió menos de un día después de que el gobierno sandinista difundiera los cuestionamientos de Ortega a la posición de Solís, quien condicionó el reingreso de Costa Rica a la comisión política del SICA a que este organismo experimente reformas en pos de la transparencia y la eficiencia.
Las críticas de Ortega hacia Costa Rica se produjeron durante una cita que el excomandante sandinista sostuvo con el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, en Managua. Actualmente, Hernández es el presidente pro tempore del SICA.
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Apenas unas horas después, Hernández se reunió en San José con Solís, donde conversaron sobre las condiciones que plantea Costa Rica para reingresar al SICA.
Este miércoles, consultado sobre las declaraciones de Ortega, Solís enfatizó en que Costa Rica no puso condiciones que no hayan discutido antes los países miembros, en negociaciones para un mejoramiento del SICA.
"No son imposiciones de Costa Rica, son entendimientos regionales que Costa Rica avala y que quiere ver reflejados en una declaración. Yo le doy la bienvenida a las declaraciones del presidente Ortega en el sentido de que Nicaragua quiere procurar la unidad de la región. Si esa aspiración del presidente Ortega es sincera, entonces facilitaremos los procesos para que esa declaración recoja esa sustantiva necesidad que tiene el Sistema de avanzar", enfatizó Solís.
"Costa Rica no condiciona a Centroamérica para regresar a los diálogos políticos de alto nivel, lo que hemos dicho es que tenemos que asumir los compromisos que ya Centroamérica ha adoptado y con los cuales no ha cumplido el Sistema. Lo que estamos haciendo es proponiendo que el Sistema se informe, cosa que casi todos los países de la región concordamos es una prioridad; estamos pidiendo que la agenda se regule, se precise de alguna manera; estamos pidiendo que haya más iniciativa de la secretaría general para que estos compromisos puedan terminar en beneficios tangibles para la gente. No son imposiciones de Costa Rica, son entendimientos regionales que Costa Rica avala y que quiere ver reflejados en una declaración", continuó.
Ortega, quien aspira a una segunda reelección en noviembre, dijo que el retorno de Costa Rica al SICA "no debe ser bajo condiciones y que todos bajemos la cabeza". Argumentó que San José se salió porque no se atendieron sus solicitudes con la crisis de los migrantes cubanos, lo que Managua interpretó como un intentó por lanzar cubanos por el Istmo sin coordinación.
El nicaragüense añadió que Solís " está faltando a las normas más elementales de respeto que se deben los pueblos (...). Ningún gobierno se ha retirado del SICA como se retiró Costa Rica ahora con el cuento este de los inmigrantes (...). Primera vez en la historia del SICA (que se retira un país miembro) ¿Y por qué? Porque no se hizo lo que Costa Rica quería cuando estaba lanzando a los inmigrantes sobre (...) los pueblos hermanos sin coordinar nada".
Integración y migrantes.
La salida de Costa Rica del foro político del SICA tiene su raíz en la crisis de migrantes cubanos que enfrentó la región centroamericana en noviembre pasado.
La situación se dio luego de la desarticulación de una banda de coyotes que traficaba cubanos desde Ecuador hasta Estados Unidos.
La caída de los coyotes provocó un aglomeramiento de migrantes cubanos en la frontera entre Costa Rica y Nicaragua.
El gobierno de Ortega cerró su frontera, impidiendo el paso de los cubanos mediante la fuerza del Ejército. Costa Rica solicitó la colaboración del SICA para llegar a una salida política y permitir el paso de los migrantes; sin embargo, Nicaragua ceró filas.
Al elevar la situación al SICA, el gobierno de Solís no encontró el apoyo esperado, por lo que tomó la decisión de retirar al país durante una reunión en El Salvador el pasado 18 de diciembre.
Aún así, Costa Rica ha mantenido la puerta abierta para su regreso al SICA, que pasará de manos su presidencia pro témpore el próximo 30 de junio. Precisamente, Nicaragua será la próxima nación coordinadora del Sistema, que recibe el control de parte de Honduras.
Para su regreso, Costa Rica solicita que se apruebe una declaración que incluya una serie de medidas para mejorar el trabajo del Sistema, y que pasa por la reducción de organismos internos que no funcionan.
"Costa Rica no va a postergar indefinidamente su reencuentro con el SICA en el nivel político. Creemos que esto es importante por diferentes razones, incluida una que es inexorable y es que Costa Rica debería asumir la presidencia pro tempore en enero", dijo en mayo pasado el presidente Solís.
