La confianza de la ciudadanía en el gobierno de Laura Chinchilla está tocando fondo, según la encuesta de Unimer para La Nación , elaborada en junio.
Por décima ocasión consecutiva desde octubre del 2010, empeoró el índice de confianza en el Gobierno, ítem incluido en este estudio nacional de opinión pública.
El indicador, que se mide en escala de 0 a 5, bajó entre febrero y junio de 0,769 a 0,747.
¿Por qué? Básicamente porque la gente califica peor al equipo de ministros de Chinchilla, porque el público cree que el Gobierno maneja mal el gasto público y porque cada vez más ciudadanos opinan que el Ejecutivo no sabe cómo resolver los problemas que aquejan al país.
Actualmente, solo 4 de cada 100 ciudadanos creen que el equipo de ministros de Chinchilla hace una buena labor.
En junio, subió de un 63% a un 66% el grupo que califica negativamente al gabinete, el cual recibe más opiniones negativas que la propia presidenta (60%).
Se trata de un equipo bastante inestable, por cierto, del cual se ha ido más el 70% del grupo que originalmente fue nombrado.
No sabe cómo. Entre febrero y junio, subió de un 36% a un 42% el porcentaje de personas que cree que, en definitiva, este gobierno no sabe cómo dar solución a los problemas del país.
A la vez, bajó de un 50% a un 45% el grupo que dice que el Gobierno sí sabe atender las preocupaciones de los ciudadanos, pero no lo hace. Solo un 3% cree que el Gobierno sí resuelve problemas.
Además, se mantuvieron las malas percepciones sobre el manejo del gasto público y sobre quiénes salen beneficiados con esta administración.
En el primero de los casos, se mantiene en más del 40% el segmento que ve un gasto muy ineficiente y en más del 40% el que lo ve un poco ineficiente. Solo un 1% dice que el gasto es eficiente.
En el segundo caso, 85 de cada 100 ciudadanos todavía creen que Chinchilla solo gobierna para algunos sectores.
En lo único que mejoró el Gobierno fue en la percepción de corrupción. Bajó de un 74% a un 69% que cree que el Ejecutivo es muy corrupto y subió de un 21% a un 25% el que cree que no es ni corrupto ni honesto.