San José
El canciller Manuel González y el vicecanciller, Alejandro Solano, se reunieron este viernes con el embajador ruso en San José, Alexander K. Dogadin, para expresarle la preocupación de Costa Rica por el incremento de armamento militar en Nicaragua, suministrado por Rusia principalmente.
Según González, la cita tuvo como objetivo primordial oficializar la preocupación costarricense por el proceso armamentista que inició en el 2014 el presidente nicaragüense, Daniel Ortega.
"La relación con la embajada rusa en Costa Rica es amistosa, fluida y frecuente (...). Le manifesté al embajador la preocupación y, bueno, le hice una reseña de algunas cosas que habíamos dicho el año pasado", dijo González.
A finales de abril, trascendió que Nicaragua adquirirá 50 tanques rusos modelo T-7211B1 como parte de una compra de $80 millones a Rusia.
Este viernes, La Prensa de Nicaragua publicó que Rusia ya embarcó 20 de los 50 tanques que le compró Managua. La publicación cita a un medio de comunicación ruso que afirma que los vehículos artillados se utilizarán para brindarle seguridad al canal interoceánico que pretende construir Nicaragua.
"A esta preocupación por la compra de tanques se suman algunos otros ejercicios marítimos que se han anunciado, temas de radares y satelitales. Y siendo un país vecino y centroamericano, yo creo que tenemos motivo suficiente para externar esa preocupación", estimó el canciller tras reunirse con el emisario diplomático ruso.
Manuel González dijo que el Gobierno no obtuvo ninguna explicación directa departe del embajador ruso. Sin embargo, dijo que esta podría surgir a finales de junio próximo, cuando se efectúe en Moscú una serie de consultas políticas entre Costa Rica y Rusia, a nivel de viceministros de Relaciones Exteriores.
En el 2013, Costa Rica también denunció la decisión de Nicaragua de adquirir varias lanchas artilladas y nuevos aviones de combate, entre otro armamento proveniente de Rusia.
La Nación publicó el 26 de abril que el Gobierno del presidente Luis Guillermo Solís reaccionó con inquietud ante la noticia de que Nicaragua había recibido 50 tanques de guerra provenientes de Rusia, que son parte de una negociación de compra de equipo bélico con ese país por $80 millones.
LEA: Compra de 50 tanques rusos en Nicaragua preocupa a Costa Rica
La información sobre la compra del armamento pesado trascendió después de que un vocero del Centro de Análisis de Comercio Mundial de armas confirmara al medio Sputnik, del Gobierno de Rusia, que Nicaragua recibirá 50 tanques rusos del modelo T-7211B1. La noticia fue reproducida en el vecino país del norte por el diario La Prensa.
Días después de anunciarse la compra de armas por parte de Nicaragua, el presidente Luis Guillermo Solís también habló en contra del creciente armamentismo en ese país.
El gobernante afirmó a la prensa que la coyuntura centroamericana actual no justifica que el Gobierno del presidente Daniel Ortega opte por reforzar su ejército.
"Cualquier recurso que se gaste, especialmente en armas, en momentos donde éstas no son necesarias, porque no hay hipótesis de conflicto que justifique una inversión de ese tamaño y equipamiento de tal sofisticación en la región Centroamericana, constituye, más que una preocupación o una amenaza, un sentimiento de tristeza", afirmó Solís, quien informó de que Costa Rica planteó la misma inquietud de diversos foros centroamericanos en meses pasados.
LEA: Luis Gmo. Solís: Situación centroamericana no justifica compra de 50 tanques en Nicaragua
La oposición nicaragüense también criticó la decisión del Gobierno de Ortega de empezar, a finales del 2014, un proceso de refuerzo del ejército.
Estados Unidos, a través de su embajadora en Nicaragua, Laura F. Dogu, expresó su interés en conocer en qué radica la decisión de Nicaragua de adquirir los 50 tanques rusos.
Venezuela y Nicaragua son los únicos países de Latinoamérica que poseen tanques T-72. Nicaragua, según el medio internacional Infodefensa.com, tiene en la actualidad 31 tanques T-55, también rusos.
Antecendentes de conflictos. Hace cinco meses, en diciembre pasado, la Corte Internacional de Justicia de La Haya, en Holanda, falló a favor de Costa Rica el conflicto limítrofe que surgió con Nicaragua después de que militares de esa nación invadieran isla Portillos, en el 2010, aprovechando el proceso de dragado del río San Juan, que conduce el exguerrillero Edén Pastora.
LEA: Fallo por isla Calero incidirá en juicio por límites marítimos con Nicaragua
A raíz del fallo, Nicaragua deberá indemnizar a Costa Rica por el daño ambiental provocado en los humedales de la zona protegida que invadió.
La primera dama nicaragüense, Rosario Murillo, dijo en aquel momento, que su país estaría en disposición de restablecer el diálogo bilateral con Costa Rica.
No obstante, el Gobierno de Solís prefiere mantener la distancia, según afirmó el canciller González en una entrevista con La Nación.
LEA: Costa Rica ha sido muy condescendiente con Nicaragua
El motivo de esa decisión de la Cancillería es que el litigio por los límites marítimos con Nicaragua aún está lejos de finalizar en La Haya.