Un estudio realizado por la Universidad Nacional y el Ministerio de Salud advierte que la vida útil de los rellenos que reciben más de la mitad de la basura de la Gran Área Metropolitana (GAM) está a punto de agotarse.
De acuerdo con el análisis, entregado en el 2013, el vertedero de La Carpio, en San José, debe cerrar en el 2016 y el de Los Pinos, en Cartago, debió terminar operaciones el año pasado.
A estos dos depósitos llegan 1.500 de las casi 2.700 toneladas diarias de basura de la GAM que reciben tratamiento técnico.
Si estas instalaciones cierran, el único relleno que quedaría disponible en la GAM sería el de El Huaso, en Aserrí, el cual ya trabaja a su capacidad máxima (1.200 toneladas por día) y tiene su clausura prevista para el 2020.
Las opciones fuera de la Gran Área Metropolitana son los rellenos de Orotina, en Alajuela; Garabito y Montes de Oro, en Puntarenas; y el Tomatal, en Limón. No obstante, ninguno tiene la capacidad de absorber la totalidad de los desechos producidos por la población del centro del país.
Eugenio Androvetto, director de protección al ambiente humano del Ministerio de Salud, reconoció la urgencia de buscar sitios para el tratamiento de la basura de esta región.
“A lo que estamos apuntando en este momento es al reciclaje, pero mientras se montan los sistemas y se consolidan hábitos de reciclaje entre la población siguen siendo necesarios los rellenos sanitarios en el país como principal opción”, afirmó Androvetto.
Tal necesidad se acentúa luego de que el Gobierno congelara iniciativas de incineración o gasificación de residuos sólidos.
Al respecto, Freddy Bolaños, jerarca de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena), detalló que esa dependencia tiene nueve proyectos de rellenos sanitarios en evaluación en todo el país.
Las instalaciones, según Setena, se construirían en Guanacaste, Limón, Puntarenas, Alajuela y San José.
Una de las opciones para la GAM sería enviar sus desechos a Montes de Oro, en Puntarenas. Alejandra Araya, encargada del relleno, señaló que ellos podrían captar 1.000 toneladas más ya que actualmente solo reciben 300
Entre tanto, Marvin Elizondo, alcalde de Garabito, enfatizó que su vertedero no tiene capacidad para captar basura de sitios vecinos y le quedan cuatro años de vida útil.
Diferencias. Las empresas WPP Continental de Costa Rica y EBI, administradoras de los rellenos de Los Pinos y La Carpio, respectivamente, discrepan del informe de la Universidad Nacional y el Ministerio de Salud.
“Nuestra empresa es la única que cuenta con los estudios sobre la capacidad volumétrica de desechos sólidos para nuestro relleno, por lo tanto es el único ente que puede indicar la vida útil del mismo”, aseveró Cristian Montero, gerente Operaciones de WPP.
En ese sentido, Montero agregó que Los Pinos puede funcionar hasta 2018.
Por su parte, Norman Sequeira, vocero de EBI, sostuvo que la vida útil de un relleno es muy difícil de calcular.
“Es muy aventurado porque depende de la capacidad del campo y la cantidad de desechos que ingresan diariamente y eso puede cambiar con el paso del tiempo”, alegó.
EBI tramita la apertura de un relleno en Turrúcares de Alajuela.