El Hospital San Carlos, en Alajuela, registra una baja sustancial en el número de consultas e internamientos por virus respiratorios, un mes después de convertirse en el epicentro de varias muertes por el virus de influenza AH1N1.
El director médico de ese centro de Salud, Édgar Carrillo Rojas, informó a La Nación de que las consultas en Emergencias por esta causa pasaron de 80 diarias hace un mes, a un promedio de 10 en la actualidad.
Carrillo también dijo que los internamientos descendieron: de 35 en el momento más crítico, a siete este lunes, con cinco enfermos aislados y dos en Unidad de Cuidado Intensivo (UCI), que evolucionan bien.
Ante la reducción que se ha venido registrando en las últimas dos semanas, este hospital disminuyó el número de camas dedicadas a aislamiento 23 a 12.
Carrillo atribuye esta baja sustancial al trabajo intenso de todo el personal hospitalario y del Área de Salud, que se ha dedicado a reforzar la educación a la comunidad sobre las medidas preventivas para frenar los casos.
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El Hospital San Carlos registra, hasta ahora, siete fallecidos por el virus de influenza AH1N1; la última paciente fue una adulta mayor de 81 años, quien murió el sábado.
Yéssica Jiménez (izq.) y Ana Jenkins, hija y viuda, respectivamente, de Gelbert Jiménez, una de las 27 víctimas mortales del virus de influenza AH1N1 en San Carlos. (Carlos Hernádez para GN)Esta mujer, según informó el Ministerio de Salud, era hipertensa y cardiópata. Con ella, la cantidad de fallecidos por AH1N1 en todo el país alcanza las 27 personas.
Carrillo dijo que, en total, los muertos por infecciones respiratorias (incluido AH1N1) desde diciembre llegan a los 15 en ese hospital.
El médico remitió al Ministerio de Salud, encargado de dar el detalle sobre los virus que podrían haber desencadenado las otras muertes.
Aprendizaje. Este pico respiratorio se esperaba para setiembre, pero por razones que se atribuyen, entre otras, al retraso de las lluvias por los cambios en el clima, los casos empezaron a aparecer a mediados de diciembre.
El principal foco fue el Hospital San Carlos.
En este centro de Salud, dijo Carrillo, han analizado las lecciones aprendidas desde entonces. Una de las más importantes es procurar que la totalidad del personal se vacune contra la influenza en la próxima campaña nacional, programada para abril.
"Es risible y lamentable que solo el 30% de la población trabajadora hospitalaria no se hayamos vacunado. Ahora, cuando se presentó este evento, todo mundo corrió por la vacuna", dijo Carrillo.
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Carrillo reconoció que la población bajó la guardia con las medidas preventivas; principalmente, lavado de manos y protegerse al estornudar o toser.
En el caso de San Carlos, los equipos de salud intensificaron las campañas educativas para inculcar entre los vecinos la necesidad de no confiarse.
Según Carrillo, esta experiencia les permitirá afrontar cualquier otro evento parecido en el futuro.