El Hospital San Juan de Dios inauguró ayer su nueva sala de hemodiálisis, un servicio que se brinda a pacientes con fallas renales con ayuda de máquinas que sustituyen la función del riñón.
En total, 110 enfermos recibirán los beneficios de esta nueva área.
El servicio se equipó gracias a la donación de personas y empresas, por medio de una iniciativa liderada por la periodista Amelia Rueda. Se recaudaron $110.000.
El espacio, de 206 metros cuadrados, presenta cambios en techos, paredes, pisos, instalación eléctrica y mecánica y en el suministro de gases medicinales.
Además, hay espacios para dar el servicio a 14 personas simultáneamente, se instaló aire acondicionado y se pusieron muebles en acero inoxidable. También hay un ultrasonido y camillas para realizar procesos de cateterismo.
A esta área se agregó un sistema de pretratamiento del agua que ingresa a la unidad, mediante unos filtros de carbón que mejoran la consistencia del agua utilizada por las máquinas de hemodiálisis.
Proceso. Según explicó Álvaro Herrera, jefe del servicio de Nefrología, este servicio beneficiará a unos 110 pacientes pues con este nuevo espacio ellos tendrán más comodidad y menos riesgo de infecciones.
La hemodiálisis es un tratamiento temporal en las personas cuyos riñones no funcionan bien. En muchos casos, se hace hasta que el paciente tenga un riñón para trasplantar.
Con la ayuda de una máquina de hemodiálisis, la sangre del paciente se filtra, y esto permite eliminar los desechos y exceso de líquidos.
Luego de esto, la sangre limpia ingresa de nuevo al cuerpo. Este proceso tiene una duración de tres horas y media por paciente.