Lilliana Núñez es una de los 70 médicos graduados en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), en Cuba, que no ha podido ejercer su profesión desde que regresó al país.
Desde hace tres años, no ha podido ganar el examen de convalidación que prepara la Universidad de Costa Rica (UCR) para evaluar los conocimientos en Medicina de los graduados en universidades extranjeras.
“¡Viera lo frustrante! Tengo compañeros trabajando en call center o en tiendas. Ya somos 70 médicos de tres generaciones diferentes los que estamos en esta situación”, dijo la joven, quien se está preparando, nuevamente, para presentar el examen, el próximo año en una fecha no definida aún.
Esta generación de profesionales enfrentó en 2012 una lucha legal para equiparar su título, pues la Facultad de Medicina de la UCR consideró que estos nuevos médicos tenían vacíos en áreas como neuroanatomía, genética o radiología.
Este examen, así como la realización del servicio social, son requisitos para registrarse en el Colegio de Médicos y ejercer la profesión en el país.
La prueba de convalidación es teórica, se hace por escrito y tiene una duración aproximada de tres horas.
Según Lizbeth Salazar, directora a. í. de la Escuela de Medicina de la UCR, en ese examen se revisan diferentes áreas de la Medicina consideradas como parte del conocimiento básico para uno de estos profesionales.
Los médicos graduados en Cuba piensan diferente: “Cuando regresamos al país, se nos dijo que ya no debíamos hacer un examen como las generaciones anteriores, si no once pruebas dadas las diferencias en los programas de estudios”, dijo Núñez.
“Luego de una lucha legal, regresamos a un solo examen, pero es antipedagógico y muy difícil. Con decirle que el de marzo nadie lo pasó, la nota mayor fue un 58. Después de apelaciones, dieron 21 puntos más”, agregó Lilliana.
Respuesta. “No es cierto que el examen sea diseñado de forma antojadiza para dejar a la gente. Esos exámenes son diseñados por expertos que saben de educación y de pedagogía y son adecuados a lo que cualquier médico general debe saber. Se hace pensando en la salud de la gente de Costa Rica”, afirmó Lizbeth Salazar.
La prueba es revisada por el Instituto de Investigaciones Psicológicas, encargado también de diseñar el examen de admisión de la UCR.
¿Por qué es una universidad quien debe decidir si los estudiantes provenientes del extranjero están facultados y no el Colegio de Médicos?
La Ley Orgánica de ese colegio, que data de 1962, establece que debe ser la UCR la que realice la prueba.
Marino Rodríguez, presidente del Colegio de Médicos, informó de que en la Asamblea Legislativa ya hay un proyecto de ley que pretende devolver a ese órgano colegiado esa atribución.
Núñez defiende la postura de que sea el colegio el que aplique la prueba, pero que no sea exclusiva para quienes se graduaron fuera del país.
“Nos hacen pruebas a nosotros que venimos de afuera, ¿pero qué pasa con la gente que se gradúa de universidades privadas? ¿Sus programas también se equiparan a los de la UCR? Deberían evaluarnos a todos”, concluyó la joven.