Una compañía proveedora de implementos ortopédicos es investigada por la Fiscalía de Fraudes porque, supuestamente, intentó estafar a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Se trata de la empresa Synthes Costa Rica, cuyas instalaciones se encuentran en un complejo de oficinas en Santa Ana, San José.
El Ministerio Público indaga si esta firma engañó a la Administración de la CCSS al cobrar $2,3 millones con 1.022 facturas falsas por placas, clavos y tornillos ortopédicos supuestamente adquiridos en el Hospital Calderón Guardia, entre el 2010 y el 2011. Las facturas no fueron pagadas.
Aparentemente, la documentación con la que presentaron el cobro era de pacientes ficticios, fallecidos o de otra área médica, informó la Fiscalía. Agregó que la investigación se amplió al 2009 para determinar si en ese periodo se hicieron pagos fraudulentos y si se cometió el delito de estafa.
Jorge Chavarría, fiscal general de la República, explicó que, según una prueba testimonial, la Caja sí habría pagado un monto a la empresa. Sin embargo, dijo que se está obteniendo documentación contable para esclarecerlo.
“Los peritos del OIJ tienen que hacer un dictamen contable y a partir de allí estaríamos tomando las medidas de posibles detenciones”, manifestó Chavarría.
Para recabar esa información, la Fiscalía de Fraudes y agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizaron ayer tres allanamientos durante todo el día.
Prueba. Los operativos se hicieron de forma simultánea, a partir de las 9 a. m. en la empresa Synthes, el Hospital Calderón Guardia (en la jefatura de Cirugía, la Dirección Médica, la jefatura de Archivo, la Proveeduría, la Secretaría de Consulta Externa de Ortopedia y la jefatura de Ortopedia) y en las oficinas centrales de la CCSS, en San José (bodega de seguridad, Auditoría y Gerencia Logística).
El fiscal general informó de que se investiga la posibilidad de que funcionarios de la CCSS hayan colaborado con personeros de la compañía en lo ocurrido.
Además, reconoció que el monto del hecho podría ser mayor.
Por su parte, la compañía indicó en un comunicado de prensa que no podía referirse a este asunto por respeto a las diligencias judiciales que se están llevando a cabo.
Irregularidad. La investigación de este caso surgió a raíz de una denuncia presentada por la misma CCSS el pasado 20 de enero.
Según informó esa institución, las irregularidades se detectaron cuando se nombró un Equipo de Transición por la jubilación del entonces director del hospital, Luis Paulino Hernández.
Ese grupo determinó que existía una cantidad de facturas relacionadas con cirugías ortopédicas para 4.519 pacientes del Programa de Osteosíntesis del Hospital Calderón Guardia.
El equipo concluyó que entre los recibos presentados había una “cantidad importante de pacientes que habían sido sometidos a operaciones (en las que) no se requerían equipos ortopédicos, como ginecología, urología y oftalmología”.
Además, algunos documentos no presentaban las firmas de los cirujanos u otros funcionarios que supuestamente utilizaron los insumos ortopédicos.
Ante eso, la Caja presentó la denuncia en el Ministerio Público y ordenó una intervención en el centro médico por esa y otras irregularidades. Para hacer la intervención, suspendió al jefe de Cirugía del hospital, Raúl Valverde; a la subdirectora médica, Sandra Montero, y al director administrativo–financiero, Marco Segura.