La idea de bajar la tarifa eléctrica a las industrias de mediano consumo y compensar esa rebaja con alzas a los clientes residenciales, no es bien vista por la Asociación de Consumidores de Costa Rica.
La propuesta, ya admitida para estudio por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), fue presentada por la Asociación Costarricense de Grandes Consumidores de Costa Rica (Acograce) el pasado 27 de setiembre.
De acuerdo con la Aresep, los industriales solicitan rebajas de hasta el 39% en la facturación, con el fin de mejorar la competitividad del país y no sacrificar empleos como consecuencia de los altos costos de su factura eléctrica.
Los aumentos en las tarifas para casas irían desde un 2,20% hasta un 11% según la compañía que ofrezca el suministro eléctrico.
Según Acograce, ese aumento sería de ¢1.025, en promedio, por cada vivienda.
“No podemos estar de acuerdo en que se sacrifique al sector residencial frente al sector industrial, sobre todo porque los beneficios que obtengan las compañías no los van a ver directamente miles de hogares”, señaló Erick Ulate, representante de la Asociación Consumidores de Costa Rica.
El vocero enfatizó que los industriales hablan de más empleo, pero no dicen cuántas personas van a contratar en los próximos meses.
Por su parte, Ronald Jiménez, presidente de Acograce, defendió su planteamiento.
“Si se mejoran las tarifas eléctricas, vendrán más empresas a invertir a Costa Rica, lo cual ayudaría a que, en el mediano y largo plazo, el costo de las tarifas se diluya entre todos los consumidores”, declaró.
Jaime Molina, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Privado (Uccaep), dio el respaldo a la solicitud de Acograce.
“Desgraciadamente, no hay otra vía para lograr esa rebaja”, comentó Molina.
Estudio. La Aresep informó, por medio de un correo electrónico, de que la iniciativa fue admitida para estudio y que en el próximo mes se convocará a una audiencia pública para discutirla.
En Costa Rica la tarifa eléctrica promedio para empresas de mediana tensión es de 17,6 centavos de dólar por kilovatio (kWh).
“Toda petición tarifaria debe estar técnicamente justificada. Además de verificar que esto ocurra, debemos aplicar los principios consagrados en la ley”, expresó Carolina Mora, encargada de prensa de entidad reguladora.