La decisión de la coalición sindical Patria Justa de amarrar, a finales de junio, un pacto con los partidos Acción Ciudadana (PAC) y Frente Amplio (FA), profundizó su ruptura con el Bloque Unitario Sindical y Social Costarricense (Bussco).
Esa es una grieta más en el frente sindical.
La Nación publicó este lunes que, entre el 2013 y el 2014, el sindicalismo perdió más de 14.000 agremiados, sobre todo por el crecimiento del solidarismo.
Pero ni la reducción de fuerzas, ni las críticas al pacto preocupan a Albino Vargas, secretario general de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) y coordinador de Patria Justa, quien defiende el pacto del Teatro Melico Salazar como la posibilidad de aportar en la construcción de “otra hegemonía en la política”, más estatista y social.
No sacan provecho. En la acera del Bussco, Luis Chavarría, secretario de la Unión de Empleados de la Caja y la Seguridad Social (Undeca), y Gilberto Cascante, presidente de la Asociación Nacional de Educadores (ANDE), condenan la alianza porque implica, según ellos, un compromiso con el sector político que poco ayuda a la lucha sindical.
Bussco entiende que esta consiste en defender las instituciones sociales y a sus empleados frente al neoliberalismo que las quiere desaparecer.
Según Chavarría, la relación de Patria Justa con el PAC y el FA, además de su agenda cercana a la del Gobierno, no ha acarreado ganancias a la causa gremial.
“No vemos que Patria Justa haya sacado ningún provecho de su cercanía con los gobiernos de Laura Chinchilla (2010-2014) y de Luis Guillermo Solís. Ni siquiera ha podido integrar mesas de diálogo”, reclamó el dirigente, quien más bien ve aumentar el descontento social.
Gilberto Cascante también protestó contra el pacto entre el sindicalismo, el partido de gobierno y el Frente Amplio.
“Sentarse a dialogar es lo valioso, no mezclar la agenda de lucha por la defensa del trabajador con la agenda política; eso genera desconfianza a la gente”, dijo.
Parlamento los divide. Albino Vargas, por otra parte, defiende los resultados que da el acuerdo, en el que son protagonistas Patria Justa y sus bases, ANEP y el Frente Interno de Trabajadores del Instituto Costarricense de Electricidad (FIT-ICE).
“Tenemos frenadas (en la Asamblea Legislativa) varias iniciativas de legislación conceptuadas, ideológicamente, por el lado del capital, de corte antiobrero. Queremos más peso, incidencia e influencia y a nadie le debe quedar la menor duda de ello”, enfatizó el secretario de la ANEP.
Vargas reconoció que el nivel de incidencia de Patria Justa creció en el Parlamento, producto de su alianza con Acción Ciudadana y el Frente Amplio.
Luis Chavarría sostuvo que en el caso de Bussco, ocurre lo contrario. El dirigente de Undeca dijo que no existe ningún lazo entre el Bloque Unitario y los diputados del PAC.
Chavarría delimitó los contactos de Bussco con el Congreso a varias reuniones con los diputados Ligia Fallas y Jorge Arguedas, del FA, pero lamentó que los acercamientos no hayan derivado en una agenda en defensa de la educación y la salud pública.