El 2016 no fue un buen año para Costa Rica en seguridad vial. Estuvo muy lejos de serlo.
Según datos de la Policía de Tránsito, el año anterior se contabilizaron 448 muertes por accidentes de tránsito; es decir, 60 más que en el 2015, 93 más que en el 2014 y 184 más que en el 2013.
Y más preocupante aún es saber que el recuento que hace la Policía de Tránsito solamente incluye las muertes en el sitio. No toma en cuenta a quienes tuvieron un accidente, pero fallecieron en los centros médicos.
El aumento en la cifra de decesos en el 2016 confirma el patrón que afronta el país desde el 2013, último año en que los fallecimientos disminuyeron con respecto al periodo anterior.
De los muertos, 197 eran motociclistas, lo que equivale al 44% de los decesos. Este gremio es el que encabeza las listas de mortalidad en años recientes.
Las colisiones entre vehículos son el tipo de accidentes que cobran más vidas, con 213 muertes, lo cual representa un 47%.
Otras causas como atropellos dejaron 70 fallecimientos; autos que se salieron de la vía, 70; vuelcos, 32; choques contra objetos fijos, 31; derrapes, 14; atropellos en los que el responsable se dio a la fuga, 14, y conductores que se quedaron dormidos, cuatro.
Debe mencionarse que octubre fue el mes más mortal, con 56 defunciones, y que el grupo etario con más pérdidas es el de personas de 21 a 30 años.
Roy Rojas Vargas, director de Proyectos del Consejo de Seguridad Vial (Cosevi), manifestó, semanas atrás a La Nación, que si no se eleva la presencia policial en carretera no bajarán las muertes por accidentes de tránsito.
La Dirección de Tránsito dispone de 763 oficiales y, según estimaciones del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), la planilla debería aumentarse en, al menos, 1.000 plazas más.
“Si no hay más policías visibles en las calles, va a seguir muriendo la gente”, dijo.
“¿Qué hace un conductor cuando va en carretera y ve un policía, pues le baja (la velocidad). Eso está comprobado absolutamente, no hay nada qué inventar (...). No tenemos los policías necesarios”, agregó el funcionario.
Aún más grave. Si al registro de muertes en el lugar del percance se le suma el número de personas que perecen en los hospitales a causa de accidentes de tránsito, las cifras se agravan.
El Cosevi consolida los datos, pero existe un rezago: de hecho, el historial disponible está hasta 2014. No hay información del 2015, ni un corte del 2016.
En el 2014, las muertes en el sitio del accidente sumadas a las ocurridas en hospitales fueron 682, 38 más que el año previo (644 en el 2013). La tasa de mortalidad en el país, para el 2014, fue de 14,3 por cada 100.000 habitantes.