‘¿Usted es adicta?’, preguntó la conductora de televisión Oprah Winfrey. ‘Sí, ¡sí lo soy!’, le contestó una sobria Lindsay Lohan, sin tener que pensarlo mucho.
Así fue como comenzó la entrevista que Winfrey, una de las mujeres más poderosas de Estados Unidos, le hizo el domingo a esa actriz, quien salió hace un par de días de un periodo de rehabilitación de 90 días en un centro de California (Estados Unidos).
La conversación es parte del programa de Winfrey, llamado Oprah's Next Chapter , que se transmitió el domingo.
Ahí, la famosa de 27 años dijo, en exclusiva, que su más grande adicción es el alcohol. Sin embargo, aceptó: “En el pasado, probé la cocaína; pero, solo la consumí en unas 10 o 15 ocasiones”.
Inmediatamente después, Lohan admitió con sus ojos verdes aguados: “Cuando me arrestaron, por primera vez, por posesión de esta droga, dije que solo la había consumido tres o cuatro veces. En ese momento mentí porque me aterrorizaba el pensar que me juzgarían por eso”.
La famosa contó que solo consumía cocaína cuando estaba de fiesta. “Con esta droga, yo sentía que podía tomar más alcohol, por eso me gustaba. La cocaína era más una cuestión de fiesta. La gente la tenía y la tomaba. Iba de la mano con la bebida”, dijo.
Impactada por lo que escuchaba, Winfrey le preguntó que cuál era el método que ella utilizaba para consumirla. “¿Cómo hacías? ¿La inhalabas? ¿Te inyectabas? ¿La fumabas?”.
Lohan respondió: “¡Inyectarme no! Yo solo la inhalaba”.
Pensamientos. Lohan aseguró que, en el 2010, momento en el cual estaba muy inmersa en su adicción, ella deseaba ir a prisión para “encontrar un poco de la paz que necesitaba”.
“Extrañamente, al estar en plena adicción y tener todo ese caos a mi alrededor, algo dentro de mí me decía que quería ir a la cárcel. Fue un modo de encontrar algo de paz y no tener otra opción que sentarme, esperar, calmarme y pensar las cosas”, afirmó la actriz, de Mean girls .
Al mismo tiempo, la famosa lamentó que fuese utilizada por los medios y la opinión pública como “un adjetivo y verbo para el mal comportamiento y una estrella infantil por el mal camino”.
No obstante, reconoció, ella misma es “su peor enemiga”. Usó el programa de Oprah para reafirmar su compromiso, tras salir del centro de rehabilitación, de “dejar atrás su pasado”.
La entrevista marca la llegada de Lohan al canal OWN, de Winfrey, ya que en el 2014 la polémica joven tendrá una serie, que es documental y reality a la vez, de ocho capítulos acerca de su recuperación.
Antecedentes. En marzo, ella evitó entrar en prisión tras acordar con las autoridades someterse a un tratamiento de rehabilitación en una clínica durante tres meses.
Llegó a esa situación por mentirle a la policía en un accidente de tráfico en el que se vio envuelta en junio de 2012, tiempo en el que se encontraba en libertad condicional por un delito de hurto que cometió en el 2011.