Redacción
Este lunes, la parroquia de Zarcero difundió un comunicado de prensa firmado por el presbítero Kenneth Castillo Soto, en el que retoma el tema del despido de Evangelista Blanco, jardinero del parque de la iglesia zarcereña desde hace más de cinco décadas.
En el texto, el párroco Castillo, quien tomó la decisión de prescindir de los servicios de Blanco, menciona que "al señor Evangelista no se le ha restringido su presencia en el parque. Él puede visitarlo y pasar momentos amenos, pero ya no como empleado, sino como lo hacen tantos costarricenses y extranjeros que visitan nuestro amado parque", reza el documento.
Además, hay un punto en el que se menciona que el parque seguirá recibiendo el mantenimiento y las mejoras necesarias.
"Se le continuará brindando el mantenimiento necesario y las mejoras pertinentes, como se ha hecho durante estos dos años y seis meses en mi gestión. Falso es y contra toda verdad que mi interés es destruir el parque. Rumores infundados existen de que yo me sienta el dueño de algo que es símbolo de una comunidad, pero realidad es, que mi función como Párroco según el código de Derecho Canónico y la legislación civil pertinente a nuestro país, es la de administrar correctamente los bienes temporales de la Iglesia católica, y esto conlleva el tener que tomar decisiones oportunas en bienestar de todos", prosigue el sacerdote de la comunidad alajuelense.
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"Hemos contado no solo con el aporte de don Evangelista, así como con tantos colaboradores, a quienes agradezco su trabajo y compromiso. Se han gestionado consultas con ingenieros forestales y químicos, también hemos colocado durante este año más de treinta bombillos LED en los faroles, con un costo mayor a los ¢2.000.000, lavado de aceras y pintado; se han restaurado las zonas verdes, se han curado de ácaros, hongos y bacterias los árboles de ciprés, así como aplicaciones de foliares, abonos y fungicidas, asegurando su continuidad en el tiempo, se han plantado arbustos, rosas, y otro tipo de elementos para embellecerlo, atraer mariposas y aves al lugar", escribió Castillo.
Obra se mantiene
En dicho documento, no se dio a conocer qué pasaría con las esculturas de ciprés que Blanco creó a lo largo de 50 años. La Nación consultó a la Parroquia de Zarcero –administradora del parque– sobre qué pasaría o cómo se mantendría la obra artística del jardinero.
Sixto Varela, vicario episcopal de comunicación, aseguró que la obra de Blanco se mantendrá.
"De momento, la administración de la parroquia no va a descuidar las figuras. Se ha invertido en sanear los árboles y resembrar otras partes. La comunidad es consciente de que se ha hecho un trabajo importante no solo en los árboles de ciprés, sino en otras partes. Que don Evangelista no esté no significa que el parque se va a convertir en un charral ni se le va a pasar con un tractor encima", dijo.
También aseguró que lo más probable es que próximamente se contrate a otra persona para que de mantenimiento a las icónicas figuras.
"Su obra maestra continúa, que él no esté no significa que todo se vino al suelo. Gracias a Dios él está vivo, pero, ¿qué pasaría si el Señor lo llamara a su presencia? Las obras siempre se van a mantener. Ahorita él no está trabajando, sería lo mismo si él muriera: la obra se sostiene hasta que nosotros podamos", aseveró.
La Nación intentó conversar con Ronald Araya, alcalde de Zarcero, para conocer su opinión con respecto a si la municipalidad tomaría medidas para contribuir con la preservación del atractivo turístico que es el parque. También se quiso preguntar si el ayuntamiento consideraba realizar algún tipo de homenaje a Evangelista Blanco por la labor realizada.