Manuel Chacón Hidalgo chaconhn@bccr.fi.cr
Los Museos del Banco Central de Costa Rica ofrecen la exhibición Tomás Povedano y los billetes de Costa Rica para presentar una dimensión poco conocida del uso de algunas imágenes de retratos, óleos e ilustraciones que realizó ese artista español en Costa Rica entre 1897 y 1943.
Tomás Povedano de Arcos llegó a Costa Rica en 1897 cuando accedió a una invitación del presidente Rafael Yglesias Castro, quien deseaba confiarle la fundación de la Escuela Nacional de Bellas Artes. Poco después, la academia se ubicó en el local de la Universidad de Santo Tomás, entonces ya cerrada.
El contexto. Durante la segunda mitad del siglo XIX y la primera del siglo XX, los grupos dominantes impulsaron el nacionalismo para cohesionar a la población en torno a un proyecto político y económico. Para ello utilizaron imágenes que reforzaban la identidad nacional y el patriotismo; por ejemplos, la develación de estatuas y las emisiones de billetes y de estampillas de correo relacionadas con la Campaña Nacional de 1856-1857.
Se utilizaron las imágenes de exjefes de Estado y expresidentes de la República, fundamentales en el proceso de consolidación del Estado y la República de Costa Rica, y se recurrió a imágenes relacionadas con la base económica del Estado liberal: la producción agrícola orientada al comercio internacional, el comercio y los transportes.
En este proceso de construcción de una idea de nación, el género del retrato fue muy importante. Se cultivó a fines del siglo XIX y a inicios del XX como forma de ensalzar a los “grandes hombres”, y sus imágenes aparecieron en publicaciones periodísticas y educativas con el fin de que fueran ejemplo.
En los billetes. De los artistas del siglo XX, Tomás Povedano fue uno de los que más influyó en la elaboración de imágenes celebratorias de los personajes, gracias a su gran talento. Realizó numerosos retratos, como los de los expresidentes, expuestos en la Asamblea Legislativa, el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Museo Nacional.
Povedano también realizó ilustraciones para textos como el Silabario castellano (de Porfirio Brenes), el periódico La Tribuna, revistas como Páginas ilustradas y El Fígaro, y para la Cartilla histórica de Costa Rica, el manual de historia más utilizado en la educación costarricense durante el siglo XX, escrito por Ricardo Fernández Guardia.
En relación con los billetes de Costa Rica, la producción de Tomás Povedano siguió dos modalidades distintas.
La primera modalidad se inició a finales del siglo XIX, cuando el artista utilizó grabados de las imágenes de expresidentes para retratarlos. Tales fueron los casos de Tomás Guardia, quien aparece en billetes del Banco Nacional de 1877, y de Próspero Fernández, cuyo retrato se grabó en billetes en 1885.
La segunda modalidad consistió en la realización de dibujos y retratos que se publicaron en la Revista de Costa Rica (1902), en El libro azul de Costa Rica (1916) y en la Cartilla histórica de Costa Rica (1909-1937). Sobre estas obras se basaron las imágenes grabadas después en los billetes.
Próceres. El jefe de Estado Braulio Carrillo (1835-1837, 1838-1842) aparece en el primer retrato conocido ejecutado por Povedano, y sirvió como base para el grabado de un billete de 10 colones del Banco Anglo Costarricense de 1903.
Ese retrato se había publicado en 1902 en la Revista de Costa Rica. Es el más reproducido pues también se grabó en billetes de 5 colones del Banco Nacional de Costa Rica en la década de 1940, y en billetes del Banco Central en los decenios de 1950 y 1960.
En 1917, la imagen de José Rafael Gallegos, prócer de la Independencia y exjefe de Estado (1833-1835, 1845-1846), se grabó en un billete de 1 colón del Banco Anglo Costarricense que nunca salió a circulación.
Otros billetes que utilizaron la obra artística de Tomás Povedano fueron los emitidos por el Banco Nacional de Costa Rica entre 1939 y 1949.
El Banco Internacional de Costa Rica se fundó en 1914, y desde entonces fue único emisor de monedas y billetes. En 1936 cambió su nombre por el de Banco Nacional de Costa Rica.
A partir de 1939, esa entidad emitió billetes con grabados que aludían de manera cronológica a distintos períodos de la historia de Costa Rica, contada a partir de personajes y sus hechos considerados importantes.
Presente. El primer billete emitido por el Banco Nacional de Costa Rica, en el que se nota la influencia de los dibujos de Povedano, es el de 10 colones de la serie F, de 1939, cuyo reverso contiene un grabado de “un cacique indígena”, muy similar al “cacique huetar” dibujado por el artista para la Cartilla .
En 1938, Povedano elaboró un retrato de Juan de Cavallón que forma parte de la Colección de Artes Visuales del Banco Central de Costa Rica. El retrato se incluyó en el billete de 20 colones del Banco Nacional de Costa Rica, serie E, en 1941. El grabador de la casa impresora Waterlow and Sons, Limited, de Londres, reprodujo el dibujo a lápiz de Povedano con asombrosa fidelidad.
Finalmente, también en 1941, salió a circulación el billete de 2 colones del Banco Nacional, serie E, en cuyo reverso está grabada la imagen del óleo de Povedano El rescate de Dulcehe , que el artista no concluyó.
Sin embargo, el grabador de la casa impresora realizó cambios y terminó la obra: agregó personajes, algunas veces siguiendo las figuras insinuadas pero no concluidas de la obra original; modificó las posturas de otras personas y agregó elementos de fondo.
En la primera mitad del siglo XX, las obras de Povedano fueron las más utilizadas en publicaciones oficiales, libros de historia y billetes de Costa Rica. Aún hoy, Tomás Povedano de Arcos sigue presente en nuestra vida cotidiana: abra su billetera y tal vez encontrará un billete de mil colones con un retrato de su autoría.
Los billetes se exponen en los Museos del Banco Central todos los días entre las 9:15 a. m. y las 5 p. m. hasta abril del 2015.
El autor es curador de Numismática de los Museos del Banco Central.