“Las amistades se encuentran en los lugares más raros”, reza el tráiler de la cinta nacional Abrázame como antes , la cual abrirá hoy la Competencia Centroamericana de Largometraje del Costa Rica Festival Internacional de Cine.
A las 6 p. m., la pantalla del cine Magaly romperá tabúes al mostrar la historia de Verónica (Jimena Franco), una transgénero que se prostituye en las calles de barrio Amón.
Una noche, el vehículo en el que viaja con unos clientes golpea a un enigmático joven conocido como Tato (Camilo Regueyra). De manera impulsiva y solidaria, Verónica decide llevar al muchacho a su apartamento, donde le ofrece abrigo y comida. Al día siguiente, ante la incomprensión de los motivos que impulsan las acciones de su anfitriona, Tato prepara un plan para escapar.
Sin embargo, entre ambos comienza a surgir una relación de gran complejidad, en medio de un intento de ambos por alcanzar esa idea lejana de familia, en medio de un ambiente nocturno poblado por encuentros amorosos, música y rivalidades.
“Es una película que pretende ocupar un lugar en la sociedad al generar diálogo y abrir un debate con respecto a una población invisibilizada y vista desde un punto de vida caricaturesco”, comenta el director Jurgen Ureña.
“Existe la posibilidad de que produzca rechazo en un sector conservador de la sociedad”, afirma. “No sería nada raro considerando que es más o menos el mismo rechazo que han experimentado estas poblaciones a lo largo de los años en el país”.
Abrázame como antes fue el proyecto ganador del año pasado en la categoría Cine en Construcción, que le otorgó financiamiento. “De alguna manera, estrenar en este festival es importante porque es una muestra de agradecimiento”, admite Ureña.
Aunque hacerse con el premio de mejor película centroamericana no deja de capturar las ilusiones del cineasta, lo cierto es que su mirada está puesta de nuevo en la Sección de Industria, en la cual compite su nuevo proyecto fílmico, Marea Blanca , una ficción policíaca que se desarrollará en la zona sur del país.