El festival de cine de Cannes celebra su 69 aniversario cargado de controversia, ovaciones, críticas negativas y comentarios radicales sobre el decadente estado de la sociedad.
La nueva película de Woody Allen, Café Society, dio el pistoletazo de inicio pero no sin antes sufrir un poco de revuelo por la polémica que ha rodeado al director por las denuncias de su hija Dylan Farrow.
El día que inició el festival Ronan Farrow, hijo de Allen y la actriz Mia Farrow, decidió escribir una columna en el Hollywod Reporter para recordar la falta de consecuencias que tuvo la carta publicada por su hermana en 2014 en el New York Times, donde describe cómo Allen había abusado sexualmente de ella cuando era niña.
Una producción que fue bien recibida, aunque no compite, fue la del excéntrico Jim Jarmusch Gimme Danger, un documental sobre Iggy Pop y su banda The Stooges.
El cantante se hizo presente en el festival y no se reservó sus comentarios. "Ahora todo es un negocio. Todos deberían calmarse un poco", señaló el músico de 69 años antes de decir que la música moderna le dan ganas de morir.
En el festival nunca faltan las películas que dividen al público. Este año una fue The Neon Demon, de Nicolas Winding Refn, director de Drive. Ya en 2013 Refn fue abucheado por la atrozmente violenta Only God Forgives. Esta vez unos se salieron a media película hablando pestes y otros aplaudieron su genialidad al final.
Acompañado por Elle Fanning, la protagonista de su filme, Refn dio una rueda de prensa muy peculiar. Dijo que si no era para causar controversia con las reacciones, no tendría sentido ir a Cannes. El danés, que trabajó con H&M para una campaña publicitaria con David Beckham, aseguró que hoy en día "la belleza no lo es todo, es lo único que importa", algo que le causa mucho temor y que considera preocupante.
Una que sí fue abucheada este año fue el thriller psicológico del francés Oliver Assayas, Personal Shopper. Protagonizada por Kristen Stewart, esta película recibió comentarios que van desde "un mejunje de géneros" y "tonterías de fantasmas" hasta "tremenda", lo que la pone en un lugar similar a la de Refn en cuanto a lo que dividir se refiere.
Si la de Assayas y la Refn fueron consideradas un fracaso solo por algunos, la que sí obtuvo duras críticas por unanimidad fue The Last Face de Sean Penn, protagonizada por su ex pareja Charlize Theron y el español Javier Bardem. Penn defendió la producción de manera sutil diciendo que le daba poca importancia a los comentarios porque "la película ya está terminada".
Aún queda un día de estrenos antes de que sea seleccionado el filme que recibirá la Palma de Oro pero ya hay claros candidatos a llevarse los premios del festival.
Se habla de Toni Erdmann, una comedia alemana dirigida por Maren Ade como la candidata al máximo galardón. La producción brasileña Aquarius está entre las favoritas de los críticos por su intensa denuncia a los problemas del país suramericano. Paterson, otra de Jarmusch, que trata de un chófer de bus que sueña con ser poeta es la otra película que fue ovacionada por los críticos y que apunta a llevarse el premio.