Donald Glover subió al escenario para recibir su primer Globo de Oro, el 8 de enero, por la serie Atlanta .
Su rol como actor principal fue el que le valió el premio, pero él también es la cara más visible de la serie porque es guionista, productor y director.
“Yo crecí en una casa en la que la magia no era permitida, así que todos los (actores) que están aquí, son como mágicos para mí; cada vez que vi una película con personas o animada, entendí rápidamente que la magia venía de la gente”, dijo el actor de 33 años.
Por unos segundos, cuando pensó que sería la única vez que subiría a ese escenario, fue serio, una excepción en el comportamiento normal de Donald Glover.
Él ha sido guionista y actor en series de comedia, hecho espectáculos de stand up comedy y además, es uno de los raperos más irreverentes que hay. Y ninguna de estos títulos se los gana diciendo siendo vulgar (aunque lo puede ser), sino desarmando lentamente los hilos de una idea hasta que de un tirón, la prenda se deshace.
Esta prenda puede ser la cultura del rap , las tragedias o el racismo; él la desarma con sus ideas y su ingenio.
Recientemente se supo que Donald Glover interpretará a Lando Calrissian en una película de star Wars dedicada solamente a a Han Solo; es decir, se volverá una de las caras más conocidas de la galaxia.
Lo que no es tan conocido es que un tipo aparentemente inofensivo, tiene un fondo muy profundo, uno que deslumbra con cada proyecto –televisivo, cinematográfico o musical– que publica.
Innovación. En el 2013 empezó una revolución que hasta ahora da sus frutos. Donald Glover era guionista de la serie 30 Rock (creada por Tina Fey) y solicitó un poco de tiempo fuera del trabajo. También pidió que redujeran sus apariciones en la serie Community (de Dan Harmon).
Ese tiempo extra que necesitaba lo utilizó para grabar su disco Because the Internet y empezar a escribir Atlanta .
Para presentar Because the Internet –su disco mejor vendido–, Glover realizó un corto llamado Clapping for the Wrong Reasons y escribió un guion de 72 páginas sobre lo que sucede después del corto.
El guion se “sincronizaba” (en pasado porque ya no está disponible en internet) con las historias que cuenta en sus canciones y así, un disco de rap se transformó en una plataforma transmedia. Las palabras tal vez sean altisonantes, pero así es Donald: no hay nada en su obra que sea gratuito.
Quizá el disco no obtuvo las mejores reseñas (las descripciones de “raro” o “un bajón” no sobraron en las reseñas), pero Glover se coronó como un políglota del entretenimiento, un hombre cuyas ideas pueden funcionar bien en una pantalla, en un grupo musical o en una sala de redactores.
Ascenso. Ya en el 2016, cuando 30 Rock y Community ya estaban fuera del aire, Glover anunció que publicaría un álbum y que por fin verían su serie en FX (aún no se estrena en el país).
El álbum Awaken, My Love lo alejó del terreno del rap y lo llevó al soul y funk psicodélicos, una hermosa puerta de entrada para los que desconocen de la obra de George Clinton y los grupos Parliament y Funkadelic.
Glover homenajeó el trabajo de ellos y escribió algunas de sus mejores canciones en el proceso, Me and Your Mama y Baby Boy , entre ellas.
Ambas canciones son explicaciones a un niño sobre sus padres y sobre lo que significa ser padre por primera vez. Glover recibió en octubre a su primer hijo y el nacimiento influyó tanto el disco como la serie.
La mayoría de los medios expecializados celebró el álbum por ser un golpe de timón y porque Glover demostró una vez más que su rango como creador solo puede expandirse.
Surreal. Antes del disco, Glover presentó Atlanta , que ahora se siente como su obra cumbre. No solo mezcló sus dos pasiones (música y actuación), sino también creó una plataforma para hablar de casi cualquier tema desde los suburbios de Atlanta, en Estados Unidos.
En los primeros dos capítulos de la serie critica la homofobia, a los tipos cursis que tratan de ligarse a la madre de su hija y se le ve incómodo mientras unos policías se burlan de una persona con trastornos mentales.
Earn Marks vive en un mundo en el que lo cotidiano es tan crudo y extraño que la aparición de un espíritu no desentona.
Su personaje, Earn Marks, renuncia a su trabajo para ser el mánager de su primo un rapero famoso en Atlanta, que en este momento es la capital del rap en el mundo.
Glover navega el mundo pesimista de los afroamericanos de clase media, de “los perdedores que vinieron al mundo a hacerle más fácil todo a los ganadores” y lo único que tiñe ese mundo de color, es su humor.
Viendo Atlanta uno se puede reír de situaciones que, si estuvieran escritas de la sección de temas nacionales de este diario, darían miedo.
Su personaje quiere ser indiferente a todo esto, pero no puede. Quiere explcarle al mundo lo que siente, pero tampoco lo logra. La única constante es que es percibido como muy negro para los blancos y muy blanco para los negros y que, en cualquiera de los dos escenarios, no encuentra su lugar en el mundo.
Él ha bromeado con eso cientos de veces pero en Atlanta finalmente lo está logrando explicar a quienes solo lo veían como un rapero o un comediante.
“Mi papá solía decirme que yo podía hacer lo que fuera que quisiera y recuerdo pensar, como en tercer grado, ‘¡Estás mintiendo!’”, dijo Glover cuando recibió su primer Golden Globe y minutos antes de recibir su segundo.
“Ahora hago muchas cosas y mi padre no puede creer nada de lo que hago, gracias”, finalizó, y el recinto entero se carcajeó.