“He ido a muchos conciertos de todo tipo, pero este es el mejor al que he asistido por muchas cosas; entre ellas, la química entre los músicos, las voces perfectas de los cantantes y la noche tan linda que hizo. Todo se confabuló para ofrecernos a los costarricenses un espectáculo de primera categoría”.
De esa manera, el espectador Carlos Fernández describió Back to the 80's , primer espectáculo de la Orquesta Filarmónica en este 2014. En esa presentación, en el Teatro Melico Salazar, se interpretaron clásicos de la década de los años 80 .
Fernández, de 43 años, salió con una sonrisa de oreja a oreja, porque revivió las noches en las que se escapaba a bailar a una discoteca ochentera.
“Esto me hizo recordar el ambiente tan mágico que se vivían en esos clubes. Todo era fiesta, era baile y, aunque aquí no se podía bailar, se sentía esa buena vibra”.
A unas cuantas filas de él, estaba sentada Patricia Ocampo. Aunque ella no vivió esa década, quiso ir para escuchar, en vivo, los populares temas de bandas como Journey y Toto. Salió encantada.
“No lo puedo describir, tenía unas ganas inmensas de pararme y bailar. Era supercontagioso el ritmo; ¡qué lástima no haber vivido en esa época!”, comentó la joven de 18 años, quien estaba acompañada por sus padres.
Emocionante. Marianela Peraza, de 54 años, fue otras de las que disfrutó de principio a fin del concierto.
Ella quería levantarse de la silla, moverse y hacer las piruetas con las que, recuerda, se robaba la atención de todos los que estaban en la disco.
“La música me vibraba en el corazón; era impresionante. Quería bailar y traerme al piso todo el teatro, pero, bueno, también hay que aceptar de que los años pasan y, por eso, los movimientos que hacía antes, ya no los puedo hacer tan bien”, comentó.
Fue así como, por medio de los recuerdos o la imaginación, las personas que fueron a este espectáculo hicieron un viaje en el que la música de los 80 y la energía fueron los principales protagonistas.
En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.