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La amistad que existe entre Piero Barone, Ignazio Boschetto y Gianluca Ginoble resultó palpable desde que aparecieron en el salón del Hotel Real Intercontinental, donde, ayer miércoles, los esperaban varios medios de comunicación.
Ellos son casi como cualquier adolescente: se hacen bromas, se preocupan por andar bien presentados con sus camisetas, gorras y lentes de pasta y se muestran simpáticos cuando están ante una bella joven.
Los Il Volo llevan cuatro años juntos, y hoy, en el Centro de Eventos Pedregal, compartirán con sus fans de Costa Rica la música de su disco Más que amor , además de temas que los acompañan desde el comienzo de sus carreras.
El deseo de los tres es mostrar que ellos no son solo una buena imagen. Para ellos, uno de los aspectos más valiosos de su carrera es demostrar que cantan con pasión, sin estar pensando en el dinero o la fama. Esa pasión es la que esperan entregar esta noche cuando salgan al escenario.
Desde que comenzaron este camino como Il Volo, llevan mucho tiempo de tener una vida llena de intensa actividad, al punto de que aseguran pasar solo un par de semanas al año con sus familias.
Pero no todo es difícil o triste; ellos prefieren ver el lado positivo de sus carreras. Por eso, aseguran que lo divertido de ser Il Volo es llevar su música italiana a los jóvenes de todo el mundo.
Otra parte igualmente grata es su relación con las fans. Según Gianluca Ginoble estar en contacto con los seguidores es parte de su trabajo y les encanta. Es así como buscan hablar con ellas, compartirles fotos y, cuando hay tiempo, retratarse juntos antes o después de sus presentaciones.
Formación. La carrera de los jóvenes los tiene hoy en Costa Rica, duermen en un hotel, cantan al día siguiente, vuelven al avión y así durante semanas.
A pesar de ese agitado estilo de vida, los tres saben que una vez que regresan a Italia, el trabajo continúa. Es cuando pasan temporadas junto a sus profesores de canto, aprendiendo y perfeccionando la técnica.
Todo lo que aprenden lo van incorporando en sus giras, dijo Piero; así cuidan sus voces para cantar hasta seis días seguidos, sin maltratarlas por falta de técnica.
Como artistas, no se comparan con cantantes de bel canto u ópera. Ellos tienen claro que les falta experiencia y aprender aún más de esta forma de interpretación.
No obstante, dejan claro que lo que hacen es una mezcla de géneros, entre el bel canto y el pop. Por eso es que tienen duetos que combinan esos dos universos: uno con Plácido Domingo y otro junto a Eros Ramazzotti.
La vida les permitió en corto tiempo alcanzar el éxito comercial y el beneplácito de cientos de fans. Pese a eso, Ignazio Boschetto afirmó que no tienen problemas con que se les suba a la cabeza el ego; él calificó la oportunidad de cantar y deleitar a muchas personas como una “bendición de Dios”.
En su mundo, al menos el que decidieron mostrar a la prensa, todo parece estar funcionando muy bien. Muestran que, primeramente, se divierten aunque no paren de trabajar. Por eso es que, por ahora, es creíble cuando dicen que solo piensan en el presente y tienen planes de estar siempre juntos.
