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En el 2007, un grupo de jóvenes costarricenses –que apenas comenzaban a resquebrajar la burbuja colegial– se las ingeniaron para grabar el disco corto Soñar es gratis, poco enterados de que aquel título pasaría de ser un manifiesto –quizá ingenuo– a un augurio de su futuro.
Tal afirmación se puede percibir como un lugar común; otro cliché de esos que abundan en canciones, películas y libros. “¡Seguí tus sueños!”, nos dicen, una y otra vez, como si el cumplir nuestras metas tan solo dependiera de quererlo.
No obstante, Percance –esa banda que hace siete años se dio a conocer en todo el país con Soñar es gratis – sabe que, aunado a ese anhelo, ha de existir también un esfuerzo y un compromiso a gran escala.
Sí, los sueños se pueden cumplir, pero los nueve integrantes del grupo saben que, para llenar conciertos con miles de almas pletóricas y poder grabar discos con ídolos personales, tuvieron que priorizar la música por encima de todo lo demás. Cada uno de sus logros tuvo una buena cuota de sudor, como sucede en cualquier profesión.
Hoy, Percance está a las puertas del lanzamiento de Contra el viento, su segundo disco de larga duración –sucesor del exitoso debut, ¿Dónde iré a parar? (2010)–, grabado y producido en Estados Unidos, con colaboraciones de tres de las más importantes musas del grupo.
Eso no fue gratuito.
El disco. Esteban Ramírez (voz) recuerda que quería trabajar de la mano del productor argentino Sebastián Krys desde el 2008, pero que la oportunidad se concretó hasta que lo conocieron en Nueva York, un par de años después.
Todos sus compañeros afirman que el productor (ganador de 13 premios Grammy) ayudó a perfeccionar el sonido de la banda, a tal punto que –luego del proceso de preproducción– terminaron grabando la mayor parte del disco en dos días.
En palabras del trompetista Felipe Sandoval: “el productor logró capturar esa esencia que tenemos al tocar en vivo, y creo que el resultado final fue el esperado”.
“Creo que avanzamos y que, sin querer queriendo, el disco es como un recorrido por el ska mexicano y argentino, sin perder la esencia”, dijo el tecladista Édgar Brenes.
Otro punto alto del disco es la colaboración con tres grandes figuras del género: Emiliano Brancciari, de la banda uruguaya No Te Va Gustar; Doctor Shenka, de la agrupación mexicana Panteón Rococó, y Jorge Serrano, del grupo argentino Los Auténticos Decadentes.
Además, la banda realizó algunos ajustes en su alineación. El joven Donny Rivas asume ahora la percusión del grupo, para llenar el vacío que dejaron César León (congas y bongos) y Luis Solís (timbales).
Rivas quiso que la percusión fuera un detalle indispensable al analizar la calidad de las nuevas canciones, un aporte que se sumó al de sus ocho compañeros, quienes grabaron el disco de forma simultánea (en dos tandas, una en Los Ángeles, California, y otra en Costa Rica), por sugerencia de Krys.
Proyecto de vida. Hay canciones de Percance, como El tiempo y Gira el mundo, que ya tienen campo fijo en la memoria colectiva de toda una generación de costarricenses. La marca que el grupo ha impregnado en nuestra cultura –especialmente en la juventud– es una hazaña sin precedentes para artistas de su género en el país.
Con más de 200.000 fans en Facebook, la banda periódicamente logra llenazos a lo largo y ancho de Costa Rica, así como ya ha dejado flechados a cientos de seguidores que los han visto en vivo en México y Colombia, eso sin contar países como Ecuador y El Salvador, en los que ha tenido extensa promoción.
Han vivido situaciones convulsas en el trayecto recorrido, desde acusaciones de plagio hasta el típico esnobismo de compatriotas y colegas, pero todavía no hubo nadie capaz de parar a la máquina: el espíritu de Percance es inquebrantable.
No es para menos, ya que este se ha convertido en el proyecto de vida de nueve músicos (Ramírez describe al grupo como su “plan A, B, C, D... y todo el abecedario”). Al sueño de la música le apuestan todas sus fichas, desde antes de que algunas personas los apodaran “Percáncer”, antes de que la banda tan siquiera editara su primer disco.
Sobre las críticas y la mala vibra, el guitarrista Dennis Vargas tiene la solución idónea: “Respetémonos, compartamos el mundo, y vivamos y dejemos vivir”. El grupo ya llegó a un punto en que, al recibir veneno, nada más lo ignora.
“No es culpa de ellos tampoco: si hay gente que es así y que quiere caer mal y hacer daño, que lo hagan, pero no vamos a responderles”, agregó Vargas. “Es fácil llegar desde afuera y criticar, sin saber qué hay detrás de esto. Todos tenemos una lucha desconocida”.
Las fuerzas negativas se combaten únicamente con contrapartes positivas (o, en su defecto, canciones), y eso es algo que Percance aprendió por medio de su propia música. “Creo que hay mucha mierda en el mundo y que hacen falta cosas buenas; sería mejor que la gente agarre esas energías negativas y haga algo positivo”, concluyó el guitarrista. Contra el viento es, sin duda, su aporte positivo.
Percance presentará el disco 'Contra el viento' en un concierto masivo a suceder en el mes de abril, previo al lanzamiento de una gira nacional y el anuncio de fechas fuera de Costa Rica.
No obstante, el disco se estrenará en un ambiente íntimo junto a los fans y prensa este jueves 20 de marzo, en el Hard Rock Café de Costa Rica, ubicado en San Antonio de Belén. Las entradas están a la venta en PubliTickets.com.
