A principios de julio, el estratega creativo de Facebook, Ji Lee, visitó Costa Rica para ofrecer un taller de una tarde a varios diseñadores y profesionales creativos durante el FID Escape, una actividad organizada bajo el nombre del Festival Internacional de Diseño y que, por segunda ocasión, se realizó durante un fin de semana en el Hotel Trogon Lodge, en San Gerardo de Dota.
Antes de realizar su taller, Lee atendió en entrevista a Revista Dominical.
–Es coreano, creció en Brasil y desarrolló su trabajo en Nueva York. ¿Cómo afectó la experiencia multicultural a su trabajo creativo?
–Nací en Corea del Sur en los años setenta. Corea, en ese momento, era un país muy pobre. Mis padres eran maestros y mi abuelo, que era de Corea del Norte, siempre fue un aventurero. Él pensó que la familia tendría mejores oportunidades económicas fuera del país.
Muchos coreanos querían mudarse a los Estados Unidos pero no era tan fácil por las leyes migratorias, así que se decidió por irse a Brasil. Tomó a sus siete hijos y todos nos fuimos juntos a ese país.
Para mí fue una experiencia que me cambió la vida porque, hasta ese momento en el que tenía diez años, nunca había visto a alguien que no fuera coreano. Solo estaba expuesto a la cultura coreana. Así que ir a Brasil fue como llegar a un planeta nuevo.
Eso tuvo una influencia enorme en la forma en la que trabajo porque comunicarme se me hizo difícil, tenía que hablar portugués sin saber una sola palabra en ese idioma. Así que tuve que aprender formas sencillas para comunicarme con los demás. Años después, eso afectó mi trabajo: aprendí a comunicar una idea de manera sencilla, en una manera más visual.
–Previamente, se ha descrito como un comunicador en lugar de decir que es un diseñador o un creativo.
–Exactamente. Eso es un punto muy importante para mí porque la gente tiende a definirse por su título: soy un diseñador gráfico, soy un periodista, soy un músico. Pero creo que lo que todos estamos intentando hacer es comunicar una idea y expresarnos.
Si me imagino a mí mismo como un comunicador eso incluye toda clase de medios para la comunicación. Podría utilizar la narración, la escritura, la fotografía. Ese título abre más posibilidades de comunicación y eso, para mí, es importante porque no quiero hacer un único tipo de trabajo. Quiero explorar y experimentar con distintos tipos de trabajo.
–Creo que las palabras son lo más importante en las relaciones humanas. El lenguaje es la manera en la definimos las cosas.
Observo a mi hijo, quien tiene 14 meses de edad, y todo es fascinante para él: Mira los interruptores de luz y se asombra, la luz le parece increíble. Todo es nuevo e increíble para los bebés.
Pero, cuando crecemos vamos aprendiendo a definir las cosas, las definimos con palabras. Esto es la luz, esto otro es una mesa. Tendemos a acostumbrarnos a las cosas y olvidamos la belleza que tienen. Las palabras son poderosas y peligrosas, definen todo lo que hacemos pero limita nuestros sentidos. Mi familia es budista y en el budismo hay un esfuerzo para no comunicarse con palabras, porque las palabras son limitantes. Pero, en el día a día, estamos forzados a comunicarnos con palabras: tenemos que escribir documentos, describir cosas.
Así que intento pensar seriamente en cómo defino mis proyectos. Nombrar un proyecto, describir el proyecto. Las palabras lo definen. De hecho, en eso se enfoca mi taller: cómo utilizar las palabras para definirlo en el futuro.
–¿Qué lo empujó a buscar un trabajo creativo?
–Siempre estuve interesado en hacer algo creativo desde que era un niño. Recibí gran influencia de mis padres. Mi mamá escribe, mi papá canta y dibuja. Siempre supe que quería convertirme en un artista.
–Hablemos sobre las diferencias entre el arte y ejercer un trabajo creativo. En ocasiones, las personas creativas se frustran laboralmente porque no sienten satisfechas sus aspiraciones artísticas. ¿Existen diferencias entre ser un artista y ser un profesional creativo?
–Hay una gran diferencia. Cuando haces trabajo creativo para un empleo o un cliente estás intentando vender algo con publicidad o diseño.
Creo que es un trabajo importante pero las personas reaccionan negativamente si les estás intentando vender algo.
El poder de hacer algo artístico es que estás expresándote a ti mismo, no estás intentando vender nada. Estás intentando expresar algo por lo que estás apasionado y lo estás compartiendo con el mundo. La gente está más abierta a recibirlo porque es personal y viene del corazón de quien lo crea.
Ese es el poder del arte y los proyectos personales. Yo me di cuenta de ese poder cuando trabajaba en publicidad y me frustraba. Comencé con The Bubble Project , vi cuántas personas alrededor del mundo lo disfrutaron y me dio la confianza y el poder para percatarme de que podía lograr mucho con esa clase de proyectos.
Entonces, aún cuando tenía trabajos exigentes, continué haciendo proyectos personales. Mis proyectos personales me abrieron puertas profesionales, me guiaron a trabajos en Google y Facebook.
Pero el beneficio más grande que obtuve fue el de divertirme, descubrí que puedo utilizar mi creatividad y pasión para divertirme. Quiero compartir eso con toda la gente a la que pueda alcanzar.
–He encontrado valor en todos los trabajos que he tenido desde que me gradué. Aprendí algo nuevo en cada trabajo.
El primer trabajo que tuve después de la universidad fue haciendo diseño corporativo para reportes anuales. No sentí que fuera un trabajo divertido pero aprendí mucho solo estando allí y trabajando con el cliente. En publicidad aprendí muchísimas cosas.
En Google fue increíble porque trabajé con las personas más talentosas que estaban creando herramientas gratuitas para cambiar el mundo a niveles enormes. En Facebook, trabajo con una compañía de tecnología increíble y responsable de conectar al mundo.
No puedo señalar un único trabajo que me ha marcado, creo que esos dos últimos han sido muy significativos porque trabajé y trabajo como parte del equipo interno de la compañía, son dos empresas con gran impacto en el mundo. Lo más especial de esos lugares es la escala de sus proyectos, me dio la oportunidad de trabajar y crear un impacto en miles de millones de personas.
–Cuénteme un poco del trabajo que hace para Facebook.
–Facebook es una plataforma que es usada por 1,3 mil millones de personas y el medio principal que utiliza es el teléfono móvil. Mi trabajo es trabajar con marcas y agencias creativas para ayudarlos a crear mensajes para sus audiencias. Muchas personas, incluyendo marcas y agencias de noticias, todavía se enfocan en producir para medios tradicionales como televisión, impresos y radio. Ahora hay tantas personas utilizando sus teléfonos para consumir contenidos y las marcas y agencias todavía están descubriendo cómo comunicarse con ellos. Es muy diferente crear video para televisión que crearlo para que lo consuman en sus teléfonos. Es mi trabajo educarlos, colaborar con ellos y ajustar sus mensajes a ese medio.
–Marcas y medios de comunicación le temen a esos cambios tecnológicos porque están fuera de sus manos.
–La gente, en general, le tiene miedo al cambio. Me acuerdo cuando The New York Times cambió sus impresiones de blanco y negro a color, hace unos doce años atrás.
La gente se opuso a la idea porque estaban acostumbrados al blanco y negro y, ahora, nadie habla de eso porque el color funciona muy bien.
Eso pasa con todo en la vida. Todo lo que es desconocido nos asusta un poco. Es cierto, los medios de comunicación están cambiando a una velocidad que nunca antes se había visto.
Si pensamos en la historia de la comunicación, las llegadas de la imprenta, la radio y la televisión fueron grandes momentos, todos trajeron grandes cambios en la forma que la gente se comunicaba y creaba contenido. Tomó muchísimos años acostumbrarse a ellos.
Con los medios digitales y los dispositivos móviles, los cambios han sido más y más rápidos y por eso ha sido más complicado ajustarse a ellos. Estamos viendo que las personas y compañías receptivos a experimentar, receptivos a ajustarse más rápido, esos son los que están teniendo más éxito.
–Absolutamente.
–¿Es una situación estresante o motivadora?
–Depende de cómo se vea. Para algunas personas es una transición difícil y estresante. Para mí estos cambios son emocionantes porque estamos en un momento de la historia en el que estos van a causar impacto en miles de millones de personas. Es como cuando los europeos llegaron a América y exploraban sus límites por primera vez o cuando el hombre llegó a la Luna por primera vez.
Había miedo pero también emoción por descubrir cosas nuevas. Para mí hay más por lo cual emocionarse, divertirse, jugar y experimentar. Creo que es la decisión de cada persona cómo verlo: verlo como una barrera a la cual temer o como una posibilidad emocionante. Escojo verlo como una oportunidad.
–Dentro de Facebook, también debe trabajar con la red de Instagram.
–Facebook adquirió a Instagram, así que si trabajas con Facebook automáticamente estás trabajando con Instagram. Cuando hablamos con nuestras marcas aliadas tenemos que hablar de todo el sistema, no solamente sobre Facebook sino de Instagram y Oculus Rift, la parte de realidad virtual. Todo está conectado.
–¿Qué habilidades tienen que tener las personas que quieran explorar estas plataformas para crear y trabajar?
–Facebook, Instagram, YouTube, Google, Kickstarter... todas ellas son herramientas gratuitas y creo que son de las herramientas más poderosas para crear y distribuir.
Si pensamos en lo que ocurría 20 años atrás, si eras un fotógrafo, un autor o un músico, era extremadamente difícil crear cualquier cosa porque era caro. Todo requería tiempo y esfuerzo. Un escritor debía primero escribir su texto, enviar el manuscrito a la editorial y esperar que alguna editorial quisiera publicarlo como un libro.
Era muy caro imprimir y distribuirlo. Eso ocurría tan solo hace 20 años.
Hoy, gracias a la revolución de medios digitales, los teléfonos móviles y las herramientas gratuitas, realmente niveló el alcance de las cosas para todos. Un individuo que vive en un pueblo alejado en Costa Rica podría tener el mismo poder que un conglomerado de medios. Desde el punto de vista del creador veo a las aplicaciones y los sitios web como herramientas poderosas para la creación y la distribución.
–Ese poder individual también asusta a las empresas. ¿Cómo pueden reaccionar las empresas a estos cambios?
–Asusta a las empresas porque es un cambio y todo está cambiando muy rápido. No saben cómo adaptarse a tiempo pero, para las compañías, también es una gran oportunidad.
No tienen que confiar solamente en las formas tradicionales de comunicación. Tienen más canales que nunca para comunicarse con sus consumidores. Es una gran manera para entender las necesidades de sus consumidores.
En el modelo tradicional, es un comunicación con una única vía: un comercial, una transmisión, un anuncio en la calle. No podías recibir los comentarios de las personas.
Ahora, los canales sociales y digitales dan poder a los consumidores para hablarle los anunciantes. Es una gran manera para que ellos aprendan de los comportamientos de sus consumidores.
–¿The Bubble Project tiene que ver con esa necesidad de comunicación bilateral?
–Sí. Yo trabajaba en una agencia y veía como producían anuncios de mierda que la gente no disfrutaba ni aprendían nada interesante de ellos.
A veces, trataban a los consumidores como idiotas desinformados. Los anuncios estaban pegados por toda la ciudad, generando contaminación visual. Así que, al colocar las burbujas de diálogo, proporcioné a la gente común y corriente un medio para comentar los anuncios o solamente para expresarse.
Como la publicidad tradicional era un canal de comunicación de una vía, esperaba que con los stickers los consumidores tuvieran algo que decir sobre la publicidad.
–Mi primera experiencia fue hace cuatro años, vine al FID y estaba muy impresionado por la escala del festival.
Había mucha energía y entusiasmo. Ha sido uno de los discursos más especiales que he hecho porque había muchas ganas de absorber lo que decían los presentadores.
Desde entonces, esta es mi segunda vez en Costa Rica. Aprendí que desde el primer FID se han creado 34 estudios de diseño.
Es un logro increíble lo que hizo el FID: le dio a la gente la confianza para comenzar sus negocios. Creo que tiene mucho que ver con reunirse en un espacio físico, hay una energía que no puedes sentir cuando te comunicas en línea.
La comunicación digital es poderosa pero hay algo aún más especial en compartir un espacio. La gente que viene a estos retiros viene buscando algo, quiere sentirse inspirada.
Nota del editor: Las fotografías de The Bubble Project fueron tomadas del sitio web de Ji Lee www.pleaseenjoy.com donde se encuentra su portafolio de proyectos.