En el ejercicio de mi labor crítica, no acostumbro hacer sugerencias para que mis lectores asistan a determinados espectáculos. Cada quien lo decide a partir de su propio criterio o del análisis de este u otro insumo informativo. Sin embargo, hoy me traicionaré para recomendar –abiertamente– este montaje. No puedo anticipar si estará a la altura del gusto ajeno, pero asumiré el riesgo.
Debo señalar que el elenco está integrado por tres jóvenes con síndrome de Down, uno con disartria (trastorno del habla) y dos más sin discapacidad. Esto nos ubica en un fenómeno escénico poco usual en el que los intérpretes encarnan hechos relacionados con la vivencia de su sexualidad. Las imágenes resultantes no se unen por la anécdota, sino por el afán de representar estados anímicos y sensoriales.
LEA: Obra de teatro 'Miradas íntimas' hurga dentro del amor de las personas con discapacidad
Los cuerpos de los actores –a veces gozosos, a veces dolientes– se encuentran en la caricia y el beso, pero también se aíslan para sufrir el rechazo. Las palabras emergen en momentos muy específicos, afirmando algo decisivo o posibilitando un desahogo. Un par de sillas y cuatro mesitas son reposicionadas durante las escenas en las que el grupo se divide para accionar en dúos o tríos.
En paralelo, el montaje estimula los sentidos dominantes de un público diverso. Una batería de esencias dispensa aromas para que las personas ciegas liberen su imaginación. Un micrófono complementa la tarea al amplificar, por ejemplo, los crujientes mordiscos a una manzana pulposa. A las personas sordas, la traductora de LESCO les recupera lo dicho. En esa estrategia, el espectáculo se vuelve modelo de conducta inclusiva.
La capa audiovisual destaca al contrastar o complementar lo que sucede en el escenario. Las secuencias proyectadas sobre el fondo colocan a los personajes en espacios donde viven su sexualidad sin restricciones. También permiten un breve retrato de carácter documental de algunos intérpretes. El tratamiento de la imagen –en blanco y negro y en cámara lenta– construye un discurso de enorme belleza formal.
Uno de los pasajes más memorables de la velada tiene lugar cuando una joven con síndrome de Down le dice a la audiencia cuánto disfruta las sensaciones que le depara su cuerpo. Sus palabras quiebran la ficción y se imponen como un testimonio de la persona, no del personaje. En el rol de espectador, uno no puede ser ajeno a este potente manifiesto de autonomía y autoafirmación.
Miradas íntimas es un proyecto extraordinario, no solo por la constitución de su elenco, sino por atreverse a discutir un tema tabú. No en balde, cerca del final, escuchamos un vox populi en el cual se afirma que las personas con discapacidad no son aptas para mantener prácticas sexuales. Sostener tal cosa en un país con altas tasas de embarazos no deseados y miles de niños no reconocidos por sus engendradores es un mal chiste.
Debido a lo anterior, la temática de esta obra no debe ignorarse. Gozar del erotismo propio o del consensuado es un derecho al que no se le deberían imponer obstáculos. A fin de cuentas, todos somos lo mismo: materia efímera necesitada de afecto, seguridad y aceptación.
Ficha artística
Obra ganadora del Fondo PROARTES
Dirección y puesta en escena: Esaú Cubero
Dramaturgia: Roxana Campos / Creación Colectiva
Actuación: Luis Fernando Álvarez, Roxana Buján, Cristian Salazar, Laura Gunther, Diana Gunther, Alejandro Ramírez
Producción: Roxana Buján y Esurios Teatro (Los Hambrientos Producciones)
Diseño y confección de escenografía: Esurios Teatro, Manuel Campos
Coreografía y diseño de movimiento: Metzí Hovenga
Producción audiovisual: Brayan Bolaños
Dirección audiovisual: Brayan Bolaños, Esaú Cubero
Fotografía y cámara: Giancarlo D´Ambrosio, Felipe Ramírez, Nicolás Solera y José Luis González
Asistente de Fotografía: Camila Urrutia
Diseño de vestuario: Esurios Teatro
Confección de vestuario: Juliana Quesada
Diseño de afiche y programa: Karina Bejarano
Diseño y técnico de luces: Shirley Benavides
Edición de música y audio: José Pablo Tapia
Diseño de maquillaje: Adriana Alvarado
Exposición fotográfica: Alejandro Ramírez
Intérprete de LESCO: Yuri Muñoz
Voces en off: Metzí Hovenga, Roxana Campos
Espacio: Teatro Giratablas
Fecha: 22 de abril del 2017