Los sectores independientes del teatro y de la danza triunfaron en los Premios Nacionales de Cultura anunciados este viernes en el Museo de Arte Costarricense.
La obra ganadora del concurso Puesta en Escena del 2014, Desaire de elevadores , triunfó por partida doble: Gustavo Monge ganó el premio al mejor director y Winston Washington como actor de reparto.
“Pienso que es la síntesis pública y oficial de un montón de años de esfuerzo”, señaló Monge, miembro del Grupo Sotavento.
Para el director, quien reside en México, el reconocimiento a tantos artistas del sector independiente es una “manifestación de lo obvio”: “El arte independiente que renueva el medio, la renueva de lenguajes estéticos, técnicos y de producción del medio artístico”, comentó.
“Es una gran motivación, me hace pensar que he tomado bien las decisiones. Me motiva a seguir creyendo en los sueños”, dijo Washington.
Otra actriz participante en la obra, María Chaves, compartió el premio de actriz de reparto con su hermana, Tatiana, por La bruta espera . “Como era un proyecto de las dos, fue como un bebé compartido desde la escogencia de los textos hasta la dirección”, celebró la actriz de la obra fue coproducida con el Teatro Nacional.
El premio al mejor actor protagónico recayó sobre Javier Montenegro, por su papel en Amadeus . El mejor grupo de teatro fue Teatro La Maga. “Es una llamada de atención para que todo el ámbito cultural de este país se de cuenta de que ser un grupo independiente es muy difícil, pero que no nos ha detenido nada”, señaló la directora, Silvia Arce.
El Premio Nacional de Teatro de Escenografía fue para Ólger Torres por La casa de Bernarda Alba .
En danza, Colectivo Clá fue reconocido por sus coreografías y talleres. “Como agrupación independiente, uno tiene que estar buscando la forma de existir,y este tipo de reconocimientos lo motivan a uno a mejorar aún más”, señaló Adrián Arriaga, codirector con Diego Álvarez.
Para Estefania Dondi, mejor intérprete de danza, el galardón llegó como “un empuje“ en un momento de cuestionamientos sobre su oficio. “Tengo que seguir luchando por lo que quiero, por lo que sueño”, comentó.
Karlton Lacey recibió una mención de honor por su desempeño en el Festival de Coreógrafos Graciela Moreno.
Por dos obras hermanas de distinto registro, el Premio Aquileo J. Echeverría en Dramaturgia se confirió a Melvin Méndez.
Ya lo pasado, pasado y Emergencia en el castillo azul , ambas estrenadas en el Teatro Impromptu Giratablas, representan dos caras de una fuerte crítica de la sociedad.
En cuanto a la música, las investigaciones sonoras de Alejandro Cardona conquistó el Premio Aquileo J. Echeverría en Música en Composición por Concierto para violonchelo y orquesta de cámara Cantos enterrados.
“El compositor trabaja las herramientas de la composición de manera convincente, para ofrecernos un laboratorio sonoro polifónico, que crea un diálogo entre quien escucha e interpreta”, anotó el jurado en su fallo.