En 1989, la distribuidora Konami y el desarrollador Hitoshi Akamatsu se arriesgaron al lanzar Castlevania III: Dracula’s Curse. E ste título salió para la consola Nintendo Entertainment System, mejor conocido como NES.
Cinco años después ese cartucho cayó en mis manos y gracias a la alcahuetería de mi tío podía ir a la casa de mis abuelos a jugar Nintendo.
Estaba en primero de la escuela y no me importaba el éxito en ventas que este título tuvo en Occidente, desconocía la existencia de las dos entregas anteriores de la saga y mucho menos iba a entender la compleja línea temporal que se inventaron estos japoneses.
Lo que si sabía era que los controles eran fáciles de entender pero demandaban tiempo para poder dominarlos a cabalidad. Por suerte, tiempo era lo que más me sobraba.
Lo único que importaba en ese entonces eran los Hielocos, los dinosaurios y la lucha del Clan Belmont en contra de su archirrival, el conde Drácula.
El videojuego Castlevania se había convertido en el tema de conversación en el trayecto de de la Escuela Católica Activa a la casa de mis abuelos.
Aquel título se guardaba muchos secretos en su jugabilidad, sus pasadizos ocultos, armas secretas y en un momento en el que no había Internet, los rumores y leyendas urbanas estaban a la orden del día.
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La historia. Para realizar este título Konami se inspiró en las novelas de Bram Stoker Drácula y la Guarida del gusano blanco y así poner al jugador en las botas de un valiente cazador.
A pesar de ser la tercera entrega de la franquicia, Dracula’s Curse es el primero en la línea temporal de la saga.
Este videojuego se desarrolla en 1476 en el reino de Wallachia, que se encuentra al norte de Transylvania, hogar del temible conde Vlad Drácula. Este personaje liberará a una horda de monstruos que causarán estragos en la población y acabarán con las fuerzas armadas de los territorios del Viejo Continente.
Para detener a estas criaturas– que solo existían en las leyendas folclóricas– la Iglesia se vio obligada pedirle auxilio a los miembros de la familia Belmont, los cuales fueron exiliados años atrás por su gran fortaleza y dominio de las artes oscuras.
Trevor, un joven de 20 años, es el heredero de la decadente gloria de su estirpe y el único que puede blandir a Vampire Killer – látigo legendario que solo puede portar un miembro del clan Belmont–.
En el recorrido Trevor encontrará a tres aliados que lo ayudarán a derrotar a las fuerzas del conde Drácula, las cuales amenazan con conquistar a toda Europa.
El benjamín del clan Belmont forjará una alianza con la sacerdotisa Sypha Belnades, el ladrón Grant Danasty y Alucard, este último es el hijo del mismo Drácula.
Estos personajes secundarios afectarán de manera determinante la jugabilidad y cada uno tendrá su propio final. Empaquetar toda esa historia y posibilidades en un solo cartucho de NES fue una hazaña concretada por Konami, e incluso a la época son miles los títulos que se inspiran en este tipo de escenarios; entre los más populares se encuentran Dark Souls , Salt and Sanctuary y Hollow Knight .
Casi 30 años después de su lanzamiento , la historia del Clan Belmont será contada en la pantalla de Netflix.
La serie. Con el estreno de Castlevania y la adaptación de The Witcher en camino, Netflix se montó en el carril para llegar al corazón de los gamers .
El proyecto protagonizado por el clan Belmont es liderado el excéntrico Adi Shankar, quien estuvo detrás de Dredd, la última cinta de los Powers Rangers y la película The Grey .
El productor de origen indio dijo días atrás al portal de información Game Revolution que Castlevania es la mejor adaptación que ha recibido un videojuego en toda la historia.
“Hay un grupo de gente que no cree que los videojuegos sean una tipo de arte y por supuesto que los son, Van a ver, este producto lo va a reafirmar”, rescató el gestor de la nueva serie de vampiros.
La animación fue realizada por Frederator Studios, y el guión estuvo a cargo del escritor inglés Warren Ellis, autor de cómics, incluyendo la aclamada serie Transmetropolitan .
La adaptación televisiva de Castlevania se estrenará el próximo viernes. En total son cuatro episodios, cada uno dura media hora. Según confirmó el portal de noticias IGN, Netflix contempla una segunda temporada para el 2018.
A los aficionados de la saga de videojuegos les toca cruzar los dedos para que Netflix logre capturar las esencia del título estrenado en 1989.