Desde finales de junio, La Nación formuló, por escrito, las consultas pertinentes sobre el tema de las vías públicas a los representantes oficiales del Conavi y nunca se recibió respuesta de su parte. ¡Qué curioso, primero niegan la información, como ha sido costumbre en los últimos meses, y después vienen a señalar, en público, que supuestamente no se investiga!
Ahora, si el hecho de que ustedes están respondiendo al reportaje de La Nación del 19 de julio pasado, al margen de los representantes oficiales del Conavi, significa que ustedes se separan del criterio de ellos, en cuyo caso deberían indicarlo así. De este modo, en adelante se les harán consultas, por separado, a ambas partes.
Precisamente a la luz de esta aparente división interna del Conavi, pregunto: ¿cómo es posible que si las empresas constructoras, algunos exministros y hasta el nuevo ministro coinciden en que el sistema tiene problemas que deben solucionarse, ustedes, responsables de la aplicación del sistema, insisten en que todo está bien?
Hay dos opciones: o ustedes no se dan cuenta de los efectos negativos de este sistema o, por alguna razón que desconozco, prefieren defender lo que, según las críticas generales, parece ser indefendible.
Con respecto a que en el reportaje de este periódico se exponen criterios de un contratista "involucrado en la contratación vial", debe tenerse claro un hecho elemental en una democracia: si un contratista o cualquier otro ciudadano sustenta sus afirmaciones con documentos y realiza gestiones oficiales ante las más altas instituciones del país, no hay razón para discriminarlo. Si se siguiera esa lógica, tampoco habría que tomarlos en cuenta a ustedes porque también están involucrados en la contratación vial.
Si ustedes quieren descalificar las declaraciones de dicho contratista y de las demás personas, háganlo con argumentos. En su respuesta, ustedes se limitan a describir el proceso que se sigue en la evaluación de ofertas, pero no rebaten las fallas señaladas por las empresas y los exministros.
Es realmente lamentable su percepción de que el debate que en este momento sostienen constructoras, exministros e, incluso, el nuevo ministro que contratará una consultoría para estandarizar los carteles solo persigue afectar negativamente a un grupo de funcionarios del Conavi, y no mejorar el sistema de manejo de recursos públicos.
Este debate y estas informaciones que, además, proseguirán tiene como objetivo informar al público sobre si el sistema requiere cambios y sobre el mejoramiento del uso de los recursos públicos de los ciudadanos.
Por la responsabilidad que el país ha depositado en ustedes, deberían ser los primeros en participar en este intercambio, en vez de darse por ofendidos.
Recuerden que, precisamente, por las informaciones de este periódico, Lananme modificó, en bien de la calidad, sus relaciones con ustedes. Estas son las ventajas de la discusión y de la transparencia. Si ustedes exigen periodismo serio y responsable, entonces pónganse a la altura de lo que están exigiendo.
(*) Periodista de La Nación