En respuesta al artículo “El MEIC y la defensa comercial”, del señor Douglas Alvarado (Foro, 24/8/06): El Ministerio de Economía (MEIC) como función primaria debe proteger al consumidor nacional. Es menester recordar que hace escasos 30 años en el país, por la economía proteccionista que privaba, solo había dos marcas de detergente de ropa donde escoger, dos de automóviles a que aspirar, una o dos de llantas que comprar, una o dos de pintura para las paredes, y así puedo enumerar otros ejemplos en alimentos, línea blanca, vestimenta, etc. que, gracias a Dios, se han superado por la apertura comercial y la competencia. La apertura que hoy vivimos, con productos de la más diversa calidad, origen y precio, ha favorecido en forma definitiva al consumidor, a todos los costarricenses. Esta nueva visión comercial altera a algunos comerciantes e industriales nacionales que aún pretenden mantener una audiencia cautiva y solo consumidora de los productos suyos que, por demás, están atrasados, son de baja calidad y caros…
No, don Douglas, no es cierto lo que usted dice, cuando desde su oficina, en forma antojadiza, en un proceso incoado por una “empresa nacional” subsidiaria de una transnacional, donde no reúne la denuncia ni los requisitos de número de afectados nacionales –industria nacional– ni el porcentaje de industria nacional afectado en el ramo, y donde el estudio de salida de la investigación económica efectuada no recomienda la acción antidumping , usted, como órgano director, dicta una resolución provisional que aumenta un 516% el arancel a las pinturas a base de agua provenientes de EE. UU. (Exp. 001-2005 OPCDMS del MEIC).
Por favor, don Douglas, entienda que no es defendiendo a una industria nacional inexistente, y a cuatro o cinco empresarios más que desean seguir con su oligopolio, como se va a combatir el dumping . Usted es un magnífico profesional, no tengo duda. Pero necesitamos que sea un gran costa- rricense y proteja los intereses de la mayoría, los de todos ciudadanos, que con impuestos pagan los salarios de profesionales como usted, que deben estar a su servicio, y no de intereses foráneos que quieren seguir, con su manos sucias, diciéndonos a los ticos cómo debemos acomodar nuestras alforjas. ¡Mucho cuidado! Que las tesis del dumping en boga pueden ser un nuevo yugo que se devela para tener nuestro progreso, como siempre, atrapado.