Plurales desconcertantes
}Por fortuna es muy bajo el número de nombres acabados en vocal acentuada (sofá, café, carmesí, dominó, menú...) que posee el idioma español. Y, además, el uso de algunos de ellos resulta raro, por no decir desconocido (albalá, faralá, pirulí, bigudí, chacolí, landó, rondó, chapó, ambigú, tisú...) .
Es, pues, una suerte tener una corta lista de estos nombres porque su pluralización ha sido siempre un dolor de cabeza. El problema empieza a insinuarse en la Gramática de la RAE de 1920, que es todavía la gramática oficial (¡¡¡!!!) del castellano mientras la Academia no decida otra cosa. Leemos ahí: "Los [nombres] que terminan en vocal acentuada reciben en el plural la sílaba es, como bajá, carmesí, rondó, tisú;^bajaes, carmesíes, rondoes, tisúes . [...] Exceptúanse papá y mamá, chacó y chapó , cuyos plurales son papás y mamás, chacós y chapós; y maravedí ; [...] Resistiéndose nuestra lengua a doblar las vocales, hoy las palabras agudas finalizadas en e toman sólo una s para el plural, como de café, cafés; de canapé, canapés; de pie, pies ".
Después de todo, lo de la Gramática de 1920 no estaba tan difícil: apenas cuatro excepciones: papá y mamá (todo el mundo sabe que los plurales son papás y mamás ), y chacó, chapó y maravedí (cuyo plural a nadie le importa un comino porque nadie va usar nunca estas voces).
Con la primavera de 1973 ve la luz el Esbozo de una nueva gramática de la lengua española , siempre de la RAE, con serias complicaciones para estos dichosos plurales. Al parecer los autores prestigiosos de nuestro idioma, fuente importante de la normativa gramatical, y, en general, todo hijo de vecino, habían hecho de su capa un sayo a la hora de pluralizar muchas de estos vocablos agudos terminados en vocal. Cada cual utilizó el plural de su preferencia, y los gramáticos se volvieron locos.
De acuerdo con el Esbozo , "gran parte de los polisílabos agudos terminados en una sola vocal, especialmente - á, -í, -ú , han adoptado la desinencia -es del plural, en competencia... con la desinencia -s. La primera parece gozar hoy de mayor prestigio literario, es contraste con la segunda, más coloquial y espontánea".
En los sustantivos en - á , se reconocen como formas más cultas sofaes y bajaes , aunque se acepta que son de uso más frecuente sofás y bajás .
En los en - í , las dos formas son aceptables ( frenesís o frenesíes , rubís y rubíes ...), aunque se emplean de modo casi exclusivo bisturís, esquís, popurrís y algunos más...
En los en - é y -ó , se da un universal plural en -s (cafés, dominós...).
Y en los en - ú , también es opcional su plural ( bambús o bambúes, tabús o tabúes ; sin embargo, para champú, menú y algún otro se emplean de modo casi exclusivo champús y menús ...
¿Confuso? ¿Quieren un consejo de este ignaro columnista? Escriban los plurales de nombres en - é y -ó siempre con - s ( cafés, dominós ). Los en - á, -í, -ú como les guste más, con solo cinco casos fijos con -s : papás, mamás, sofás, champús y menús .
¿Ve que no es tan difícil? ¿Por qué la Academia nos complica tanto las cosas?