El América se volvió a reponer de la adversidad y le remontó al Impact de Montreal para terminar celebrando, en Canadá, el título de la Liga de Campeones de la Concacaf y el boleto al Mundial de Clubes de finales de año.
El argentino Darío Benedetto, con tres anotaciones, volvió a ser el jugador estrella en una remontada clave de las Águilas , que volvieron de un 3-0 en la ida ante Herediano –en semifinales– y ayer –tras empatar 1-1 como locales en la ida– empezaron perdiendo en Montreal.
Andrés Romero abrió el marcador, al 7’, tras una gran jugada por la derecha del también argentino Ignacio Piatti.
Pasado el embate del primer tiempo, periodo en el que Benedetto ya había anunciado su presencia con un palo, al 12’, el América aprovechó un bajón de ritmo del local y tomó las riendas para la complementaria.
Apenas al 49’ se empataba el juego y el global con una exquisita tijereta del 9 crema.
Oribe Peralta marcó la remontada, al 64’, y un minuto después Benedetto anotó el lapidario 1-3.
Benedetto completó su triplete al 80’ y así empató con Oribe como cogoleadores del torneo.
El descuento, de Jack McInerney al 89’, no sirvió ni para maquillar la derrota del Impact, que en un tiempo perdió la oportunidad de evitar la décima coronación consecutiva de un conjunto azteca en la Concacaf.
Bejarano sin problemas. En la final hubo protagonismo tico por parte del cuarteto arbitral, conformado por Henry Bejarano (central), Leonel Leal, Octavio Jara y el secretario Jeffrey Solís.
El árbitro se evitó los problemas y terminó sin expulsiones.
“Dejaron una buena impresión a pesar de que fue un juego friccionado”, comentó el exárbitro Greivin Porras.