El Reto Powerade se ha posicionado como una clásica dentro del calendario del atletismo nacional. Sus cuestas de alta exigencia y constantes columpios se convirtieron en las principales características, pero eso cambiará para esta edición.
La competencia, programada para el próximo domingo 20 de octubre, varió su ruta. Ahora tendrá menos pendientes y vuelve a como se inició: siendo un circuito de 10,5 kilómetros.
La salida y meta será en Avenida Escazú y no en Multiplaza, como sucedió en el 2017 y 2018. Años atrás su casa fue Belén, en Heredia.
Esta decisión se tomó en conjunto entre Powerade y Global Sport Group, el coorganizador del evento.
¿Por qué un circuito?
“Para nosotros la seguridad es muy importante y hemos desarrollado una ruta más segura porque estamos utilizando muchos barrios, no es que nos vamos a dar vueltas en barrios, pero al estar entre Avenida Escazú, Guachipelín y Trejos Montealegre, solamente vamos a pasar por calle principal durante cuatro kilómetros. Esto da posibilidad de controlar a los atletas”, explicó Mario Reyes, director de Global.
Pero a esa razón, también se une regresar a la raíz de la carrera. Reyes cree que esto no tendrá tantas implicaciones, aunque es sabido que en ocasiones la gente se queja de los circuitos.
"Más que todo lo hicimos por la trayectoria de la carrera. Hay gente que no le gusta el circuito, pero es difícil quedarle bien a todos. Creemos que ya es una carrera de la que se sabía, es circuito", agregó Reyes.
Cuando habla de seguridad, la organización también pensó en los atletas que pueden tardar de 2 horas y media en adelante, porque se enfrentan a más automóviles.
Reyes hizo hincapié que mientras no sea posible cerrar las calles por completo, las carreras se deben hacer temprano o buscar sectores con poco tránsito. Mucho de esto se resuelve con un circuito, insistió.
Al mismo tiempo, el Reto será menos exigente en cuanto a altimetría se refiere. Es mucho más plana que las 15 ediciones anteriores.
“Es más ‘corrible’ para alcanzar mejores tiempos, pero la carrera no es de bajada. Tiene una cuesta que en la segunda vuelta les va a costar, pero también considero que se puede hacer mejor tiempo que antes”, explicó.
Incluso, asegura que fue parte de una recomendación para que lleguen más atletas y haya mejores cronos.
Tras salir de Avenida Escazú, los corredores tomarán hacia Trejos Montealegre, pasarán por la plaza de fútbol de San Rafael, Guachipelin, Hotel Sheraton, Multiplaza, Laureles, luego llegan a la paralela de la ruta 27 y regreso a Avenida Escazú.
Los 5 y 10 kilómetros tienen un costo de ¢13.560 y los 21 km de ¢18.080 (ambos precios con el IVA incluido). La salida será a las 5:15 a. m. para las tres distancias.
El Reto Powerade también desea hacer un evento más familiar, por lo que habrá actividades para las personas que esperan a los competidores en Avenida Escazú. Además, los restaurantes de ese centro comercial tendrán precios especiales el sábado (día de entrega de paquetes) y el domingo.