Limón. Un comando asaltó ayer en la madrugada el hospital Tony Facio de Limón y mató a balazos a un paciente que se encontraba en el salón de Cirugía de Hombres.
Voceros policiales identificaron a la víctima como Henry Orlando Clarck Hines, de 26 años quien recibió dos balazos en la espalda y otros dos en los glúteos.
El ataque fue protagonizado por tres jóvenes “mulatos y de pelo larguillo” quienes sorprendieron a un hombre y una mujer que fungían en ese momento como vigilantes del centro médico.
Ambos fueron encañonados con armas de nueve milímetros. Ella fue lanzada debajo de un escritorio y él, arrinconado contra la pared por dos de los sujetos.
El asesinato de Clarck consternó a los pobladores limonenses, provincia sacudida desde hace varios años por una escalada de violencia.
Según un estudio de la Oficina de Planes y Operaciones del OIJ, Limón registró en el 2006 una tasa de 15,8 homicidios por cada 100.000 habitantes, la más alta del país. La cifra supera incluso la de San José: 8,9 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Muchos de los crímenes en Limón no han sido esclarecidos porque los testigos se rehúsan hablar, según dicen, por temor a ser asesinados.
“El problema más grave de Limón es la impunidad. Nadie quiere declarar porque temen por sus vidas. Los delincuentes lo saben y por eso atacan al descaro, porque saben que causan terror y nadie se atreve a denunciarlos”, lamentó un jefe policial.
El director del hospital Tony Facio, Davier Vidal, calificó el homicidio como “un hecho vil y cobarde” y un atentado contra la seguridad social del país.
Balacera. Tras reducir a la impotencia a los vigilantes, uno de los pistoleros subió al segundo piso del hospital para dirigirse hasta la Cirugía de Hombres donde se encontraban durmiendo siete pacientes, entre ellos Clarck, en la cama número 248.
“El sujeto se fue directamente a esa camilla y disparó cuatro veces. Todo fue muy rápido. Después, salió para encontrarse con los otros dos hombres y se marcharon. A lo sumo estuvieron dos minutos”, relató el director del Tony Facio.
Los delincuentes no hirieron a nadie y, según informes policiales, conocían el área de acceso donde se encontraba Clarck, quien se recuperaba tras haber recibido dos balazos, la tarde del lunes en Moín.
Tras la balacera, varios médicos, entre ellos el director del Tony Facio, corrieron para atenderlo y le practicaron maniobras de resucitación durante 35 minutos. Sin embargo, todo fue en vano. Clarck fue declarado muerto a las 4:10 a. m.
Clarck es ligado con una de las dos banda más violentas de Limón y había sido investigado por homicidio, amenazas con arma de fuego, tenencia de armas prohibidas, lesiones, asaltos y tráfico de drogas, de acuerdo con informes del OIJ.
Las autoridades creen que fue atacado por miembros de una banda que opera en el barrio Cristóbal Colón, conocida como Cieneguita, con quienes estaba enemistado luego de un asesinato ocurrido el 17 de enero, frente al hotel Mar Azul en Moín.
Los agentes judiciales trataban ayer de dar con el paradero de los asesinos.