La persecución de un sospechoso, que incluyó una serie de maniobras temerarias, así como la colisión de dos vehículos, terminó ayer para un sujeto de apellido Ballestera en el portón de un vivienda.
El hombre perdió el control del carro en el que escapaba –un Honda– y se estrelló contra una propiedad en Concepción Arriba de Alajuelita, al ser las 3:30 p. m.
Para entonces tenía más de 20 minutos de huir de una pareja de agentes del OIJ quienes, como parte de una investigación, intentaron detenerlo en Aserrí, San José.
Aros. Los investigadores pretendían verificar si el carro circulaba con los aros de otro vehículo robado mediante un “bajonazo”.
A toda velocidad y en el intento por perder a los oficiales, el hombre se introdujo en varias calles.
De paso golpeó un autobús, así como el taxi de Miguel Masís, quien circulaba por San Rafael Arriba, Desamparados. “Yo iba a entregar el taxi. En eso el carro hizo un viraje raro; quedó en dos llantas. Sentí un impacto, pero el conductor no se detuvo”, relató el taxista.
En una cerrada curva el carro de Ballestero derrapó y se salió de la vía hasta chocar contra el portón de la casa de Miguel Fuentes.
El Honda tenía el número de chasis alterado.
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