Dos hermanos gemelos resultaron gravemente heridos al ser atropellados por un motociclista sin licencia y con escasa experiencia en el manejo de ese tipo de vehículos, ayer, a las 10:30 a. m., en San Miguel de Desamparados.
La Policía del Tránsito identificó a las víctimas como Nelson Eduardo y Randall Eduardo Segura Sandí, de 20 años, quienes anoche permanecían, muy delicados, en el San Juan de Dios.
De ellos, la peor parte la llevó Randall, quien, según informes de la Cruz Roja, presentaba una grave lesión en el cerebro, así como heridas en pecho y piernas.
El otro gemelo también sufrió heridas en la cabeza y tórax, pero su condición era menos delicada.
Ambos son vecinos de El Llano de Desamparados. En el momento del accidente de dirigían hacia la casa de sus padres.
“Haciendo loco”. El accidente fue causado por Alexander Jesús Córdoba Aguilar, de 21 años, vecino de Los Guido de Desamparados, quien se movilizaba a gran velocidad en una motocicleta que poco antes le prestó un amigo no identificado.
Lo acompañaba otro amigo, Marvin Vargas Solís, de 19 años, quien también resultó herido
El oficial del Tránsito, Mariano Alfaro, confirmó que Córdoba no cuenta con licencia para conducir. Además, no usaba casco; tampoco su acompañante.
Los dos jóvenes cayeron a varios metros de distancia y se golpearon la cabeza contra el pavimento.
De todos, quien sufrió más lesiones fue el conductor de la motocicleta, quien anoche permanecía en coma en el San Juan de Dios.
“Las versiones coinciden en que se dio una combinación de exceso de velocidad e imprudencia. Esa moto embistió a dos peatones, de forma muy violenta, en una curva por donde venía más gente”, dijo.
Vecinos que pidieron no ser identificados afirmaron a las autoridades que el motociclista “venía haciendo loco” desde hace rato con la moto, y le habían advertido que podía atropellar a alguien en cualquier momento.
Aseguraron que el muchacho “subía y bajaba por la calle principal a gran velocidad, acelerando cada vez más la motocicleta para impresionar a sus amigos”.
Otros accidentes. A las 6:30 a. m. de ayer, en Brasil de Alajuela, murió Josué Herrera Álvarez, de cuatro años, al caer de la motocicleta que conducía su padre.
En ese momento, fue golpeado en la cabeza por un carro que conducía un adolescente de 17 años, a quien detuvieron varios taxistas.
Otro choque, ocurrido en Paso Canoas, frontera con Panamá, cobró la vida de José Fuentes Cascante, de 21 años, quien chocó el auto que conducía contra un furgón estacionado. Colaboraron Freddy Parrales y Francisco Barrantes, corresponsales.