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Un barco pesquero costarricense encontró ayer a los cuatro ocupantes de la embarcación Geminis II , que desapareció en el océano Pacífico el 31 de agosto.
El hallazgo lo hizo el barco Fortuna III cuando navegaba a 270 millas náuticas (500 kilómetros) del puerto de Acapulco, México.
Carlos Alvarado, director del Servicio Nacional de Guardacostas, informó de que los pescadores están en perfectas condiciones y no presentan deshidratación ni quemaduras.
El Géminis II salió el 18 de agosto de Playas del Coco, Carrillo, Guanacaste, con cuatro personas: Rodolfo Zapata Jiménez, capitán, a quien acompañaban José Manuel Dávila Peña, Félix Antonio Pérez Noguera y Juan Antonio Valladares Chavarría.
Falla. Carlos Alvarado dijo que en una conversación que mantuvieron con el capitán del Fortuna III , les indicó que el Géminis II sufrió una falla en el sistema de arranque del motor, por lo cual se quedaron a la deriva.
Agregó que están intentando arreglar el problema mecánico.
Empero, el jefe de los Guardacostas manifestó que se les recomendó a los ocupantes del Géminis II no arriesgarse a devolverse solos a nuestro país.
Expresó: “Es mejor que esperen que los ocupantes del Fortuna III terminen de realizar las faenas de pesca y luego regresen los dos barcos juntos, para evitar que sufran un nuevo desperfecto”.
Se estima que las embarcaciones podrían permanecer en el sector entre 12 y 13 días.
Según indicó Carlos Alvarado, los desaparecidos habían recibido alimentos de un barco mercante y, además, subsistieron comiendo pescado y recogiendo agua llovida.
Reacciones. Por su parte, Manuel Ángel Canales Aguirre, dueño del Géminis II , dijo sentirse muy alegre del hallazgo sobre todo porque “los muchachos están bien”.
Añadió que todavía no se había podido comunicar con los pescadores, pero que esperaba hacerlo en las próximas horas.
“Tengo que hablar con el dueño del Fortuna III para ver a qué arreglo llegamos”, manifestó.
Entre tanto, Evarista Chavarría, madre de Juan Antonio Valladares, afirmó que nunca perdió la esperanza de localizarlos vivos.
“Estoy muy agradecida con Dios. Nunca perdí la fe y ahora me ayudó a localizarlos”, dijo.
Agregó que la noticia trajo mucha alegría a la familia, sobre todo a los tres hijos de Juan Antonio.
“Anoche (el miércoles) estuvieron llorando y diciendo que cuándo volverá papito. Es una gran noticia, pero hasta que nos los vea no la voy a creer”.
Valladares era el encargado de llevar alimentos a su familia, que para poder subsistir se trasladó a vivir a la vivienda de Evarista Chavarría.
“Ellos han recibido mucha ayuda de vecinos, amigos y del Club de Leones. No les ha faltado la leche para los niños”, declaró Chavarría.
Los pescadores extraviados tienen mucha experiencia en labores de pesca pues, según dijeron familiares, desde muy pequeños comenzaron a salir a pescar.
Todos son originarios de la comunidad de Playas del Coco y alrededores.
