El juez Miguel Ángel Lizano Córdoba, detenido el miércoles por intento de homicidio, impartió clases de Derecho –en la sede de la Universidad Latina en Limón–, al intermediario que él mismo supuestamente contrató para matar a su jefe en Pococí.
El sospechoso, de apellido Guido (30 años), fue alumno de esa casa de estudios. Así lo confirmó dicha universidad ante una consulta de La Nación .
Cindy Madrigal, gerente de Relaciones Públicas de la Universidad Latina, señaló que los datos constan en los expedientes. “Lamentamos los hechos”, dijo.
El fiscal adjunto de la Fiscalía General, José Pablo González, explicó que Lizano contrató a Guido, un limonense sin antecedentes penales, para que planeara el ataque. El sujeto es dueño de una compraventa en Limón, donde, el miércoles, se decomisaron 19 armas de fuego.
Guido, a su vez, realizó un enlace con otro limonense de 27 años, apellidado Núñez, quien se encargó de contratar a los gatilleros, de apellidos Víquez, Platero y Alfaro, para que perpetraran el asesinato de Jorge Paisano Saborío.
Paisano, quien coordina el Tribunal de Juicio de Pococí, sufrió un atentado el 14 de diciembre del 2012, 400 metros antes de llegar a su oficina, cuando tres sujetos en un vehículo dispararon dos veces contra su carro; no obstante, el juez resultó ileso.
Núñez es investigado por legitimación de capitales y amenazas agravadas. Esta causa aún se encuentra en etapa preparatoria en el Ministerio Público.
En el caso de los gatilleros, ninguno tiene antecedentes ni oficio conocido, según el OIJ.
Platero fue estudiante de Criminología en la Universidad Libre de Costa Rica (Ulicori), en su sede de Limón, hasta el segundo cuatrimestre del año pasado.
Carlos Alberto Paniagua, rector de esta universidad, confirmó el dato y expresó: “Como costarricense, lamento que un compatriota haga esas cosas. Ninguna universidad ni familia tienen culpa de lo que está pasando”.
Hasta ayer, al cierre de edición, el Juzgado Penal de Pococí no había resuelto la solicitud de un año de prisión preventiva que la Fiscalía presentó para los seis imputados.
Armados. Datos del Departamento de Armas y Explosivos, del Ministerio de Seguridad Pública, revelan que el intermediario de apellido Guido tiene vencido el permiso de portación de armas desde octubre del 2012. A su nombre hay inscritas dos pistolas y una escopeta.
Por su parte, Núñez tiene vigente el permiso de portación de armas hasta el 2 de diciembre del 2013. Este individuo tiene inscritas cuatro pistolas. Por su parte, los gatilleros no registran permiso de portación.
El abogado Lizano tiene 26 años de trabajar en el Poder Judicial, donde ingresó como conserje. Solo le faltan cuatro años para jubilarse. El 1.° de mayo del 2009 obtuvo una plaza en propiedad en el Tribunal Penal de Limón, con nota de 81. Luego, concursó para una plaza, con nota de 85, y fue trasladado al Tribunal Penal de Pococí el 1.° de agosto del 2011.