Oficiales de la Sección de Fraudes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) allanaron ayer cuatro empresas, como parte de una pesquisa por una supuesta defraudación fiscal de ¢46 millones.
La acción policial la realizaron debido a una denuncia interpuesta en julio pasado por Francisco Fonseca, director general de Tributación, una dependencia del Ministerio de Hacienda.
El funcionario reveló presuntas anomalías con una exoneración del impuesto de ventas en la importación de maquinaria para la construcción de la central hidroeléctrica La Joya, en Tucurrique de Jiménez, Cartago,
El OIJ informó de que las empresas allanadas son Unión Fenosa, en Escazú; TTS de Costa Rica ( una firma asesora), en Moravia; la agencia aduanal Óscar Ramos Valverde, en el Paseo de los Estudiantes, y Cotera y Asociados (una empresa de contadores), en barrio Francisco Peralta, San José.
Durante el operativo que se ejecutó de manera conjunta, se decomisaron documentos relacionados con la importación de una maquinaria especial que, por llegar a nombre del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), se le exoneraba del impuesto de ventas.
El proyecto hidroeléctrico La Joya entró en operación en junio pasado, con capacidad instalada de 50 megavatios.
Aunque anoche se intentó localizar a Gonzalo Fajardo, representante legal de la empresa Unión Fenosa, no se lo pudo localizar, pues se informó de que no tiene registrado teléfonos a su nombre.